El fallecido líder y fundador de las FARC, Pedro Antonio Marín, alias "Manuel Marulanda" o "Tirofijo", era dueño de 57 fincas en Colombia, reveló este sábado el presidente Juan Manuel Santos.

El mandatario colombiano precisó a los periodistas que los predios de "Tirofijo", muerto en 2008 de causas naturales y fundador de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), están en el departamento de Cundinamarca, del que Bogotá es su capital, y en Santander (noreste).

Igualmente, Santos señaló que las FARC y el Ejército de Liberación (ELN), la segunda guerrilla del país andino, robaron a campesinos unas 90.000 hectáreas en los departamentos de Cundinamarca, Santander (noreste) y Meta (centro).

La información revelada por Santos en un consejo de seguridad en Valledupar, capital del departamento del Cesar (norte), se desprende de correos hallados en computadores de Víctor Julio Suárez, alias "Jorge Briceño Suárez" o "Mono Jojoy", muerto en septiembre de 2010 y de Guillermo León Sáenz, alias "Alfonso Cano", muerto en noviembre de 2011, entre otros.

Santos detalló que en un mensaje el frente 40 de las FARC, enumera un inventario de 36 fincas que están en su poder, 90 por ciento en el departamento del Meta, y el estado en que está cada una de ellas.

Asimismo, un informe del frente Yarí hace referencia a 76 propiedades rurales en su poder, que suman 89.240 hectáreas.

"Este es simplemente un pedacito de lo que encontramos del Frente Yari", señaló el mandatario.

Según Santos, en otro correo, esta vez del Ejército de Liberación Nacional (ELN), alias "Mosquera" señala al mando de esa guerrilla la necesidad que tienen de legalizar "fincas, parcelas y viviendas" que tienen en el departamento de Bolívar (norte).

El presidente colombiano ha dicho en reiteradas oportunidades que las guerrillas intentan legalizar tierras robadas pero asegura también que el Estado las recuperará para devolverlas a sus verdaderos dueños que pasaron a formar parte de la masa de desplazados.

Santos aseguró que el Gobierno, con el apoyo de la Fuerza Pública y de la ciudadanía, vencerá los obstáculos que se presenten en el proceso de restitución de tierras y advirtió que brindará todas las garantías para que el proceso salga adelante.

A mediados de este mes, el Gobierno colombiano comenzó a implementar la Ley de Víctimas y de Restitución de Tierras con la entrega a campesinos desplazados por el conflicto armado de 4.225 hectáreas confiscadas a narcotraficantes en Córdoba, bastión paramilitar hasta la década pasada.

De acuerdo con datos del Gobierno, las FARC, el ELN y grupos paramilitares han robado al Estado y a campesinos más de 700.000 hectáreas, que serán recuperadas para devolverlas a los campesinos, sus verdaderos dueños.

El Gobierno espera que para este año se fallen al menos 2.100 casos de restitución de tierras y la meta es que antes de que finalice el mandato de Santos, en 2014, sean tituladas y devueltas 3.500.000 hectáreas.