El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijo este sábado al ELN, segunda guerrilla del país y con quien mantiene negociaciones preliminares, "que los está dejando el tren de la paz", tras los secuestros recientes de dos solados.

"El mensaje al ELN (Ejército de Liberación Nacional) es: los está dejando el tren de la paz", respondió Santos a periodistas durante una comparecencia en Bogotá, tras una semana en la que la guerrilla ha recibido varias advertencias para acelerar el paso a la fase pública de los diálogos.

"Estamos haciendo todo lo que tenemos que hacer", agregó el mandatario.

"Ellos saben que estamos listos a continuar, como lo hemos venido haciendo, aplicando la contundencia de nuestras fuerzas militares y (...) que no vamos a bajar la guardia", añadió Santos antes de pedir la liberación de los soldados del Ejército Jair de Jesús Villar Ortiz, secuestrado el miércoles, y Ramón José Cabrales, en poder de la guerrilla desde 2014.

La policía y el Ejército capturaron esta semana en Antioquia a un jefe del ELN conocido como "Horqueta", "responsable de la mayoría de extorsiones en el Bajo Cauca y el nordeste antioqueño (noroeste del país)", dijo este sábado la Policía Nacional en un comunicado.

En otra operación en el departamento de Arauca (este, frontera con Venezuela), el Ejército detuvo a un ciudadano venezolano con uniforme del ELN al que acusa de intentar perpetrar un atentado contra infraestructura energética de la región.

El ELN, fundado en 1964 bajo influencia de la revolución cubana, sostiene desde enero de 2014 diálogos preliminares de paz con el gobierno de Santos, que busca iniciar con esta guerrilla un proceso paralelo al que tiene lugar en Cuba desde hace tres años con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas), principal grupo insurgente del país.

Frank Pearl, jefe de la delegación oficial en las pláticas con el ELN, advirtió esta semana a la guerrilla que "se le está acabando el tiempo" para instalar negociaciones formales para acabar con medio siglo de conflagración interna.

El propio Santos dijo el lunes estar "en espera" de concretar las reuniones necesarias "para pasar de la fase confidencial a la fase pública" con el ELN, organización que cuenta con unos 1.500 combatientes según datos oficiales.

El conflicto colombiano, que comenzó como una sublevación campesina hace cinco décadas y ha involucrado a guerrillas, paramilitares y fuerzas del Estado, deja ya unos 220.000 muertos y seis millones de desplazados. (I)