Rusia sigue los pasos de EE.UU. y trata de influir sobre Venezuela
El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, inició en Cuba una visita por Latinoamérica. Su llegada coincide con el final de la gira de cinco días que el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, realizó por la región.
Los dos altos funcionarios llegaron con el tema de Venezuela en su agenda, aunque con posturas divergentes sobre la solución de la crisis del país sudamericano.
Tanto la visita de Pompeo como la del canciller Lavrov es motivada por los intereses de sus respectivos Estados, resaltó el analista ecuatoriano Carlos Estarellas.
El docente de la Universidad de Guayaquil, William Arcos, coincidió con Estarellas y señaló que los altos funcionarios tienen claramente definida la posición de sus países y simplemente la reafirman en estos viajes.
Venezuela se convirtió en un punto de discordia en la región entre EE.UU. y Rusia hace seis meses, cuando el 23 de enero pasado Juan Guaidó, titular de la Asamblea Nacional, se proclamó presidente interino del país, título con el cual lo reconocen más de 50 países, entre ellos Ecuador.
Desde entonces ambas naciones refuerzan su retórica y se acusan de interferir en la crisis interna del país sudamericano. Mientras que Estados Unidos -a través de Mike Pompeo- reiteró su “apoyo inquebrantable” a Guaidó; Rusia asumió un papel protagónico en la defensa del gobierno de Nicolás Maduro, explicó Estarellas.
En este contexto, el pasado fin de semana el viceministro ruso, Sergei Ryabkov, concluyó una ronda de consultas en Caracas, con el objetivo de fortalecer la “asociación inquebrantable” con el país.
Siguiendo con esta agenda diplomática, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, llegó ayer a Cuba, donde advirtió a EE.UU. que “toda Latinoamérica impedirá una intervención militar en Venezuela”.
Lavrov destacó que Rusia dialoga con todas las partes en Venezuela, incluida la oposición. “También nos contacta la gente de Guaidó. Les explicamos que es inadmisible solucionar los problemas internos provocando una injerencia exterior”, precisó el canciller, que también visitará Surinam y Brasil.
Rusia es importante para que el régimen de Maduro aguante las sanciones de EE.UU. y la petrolera estatal Rosneft es clave para ello, afirmó el enviado de EE.UU. para Venezuela, Elliott Abrams, en una entrevista para el ABC de España.
“Venezuela le debe mucho dinero, tanto que el año pasado la deuda era de $ 8.000 millones. Cuando sancionamos a Pdvsa (petrolera pública venezolana) lo primero que hizo Venezuela fue acudir a Rosneft para que los ayudara a vender el petróleo que antes comprábamos en EE.UU.”, indicó Abrams.
En tanto, Pompeo culminó el lunes su gira por Argentina, Ecuador, México y El Salvador, donde ratificó su rechazo al régimen de Maduro y lo acusó de crear “una crisis humanitaria sin igual” y destruir la calidad de vida de los venezolanos.
Estados Unidos mira con recelo el apoyo de Rusia a Venezuela, porque “no puede permitir que un país que está fuera del hemisferio occidental haga este juego en su espacio común, indicó a la BBC el analista James Dobbins. (I)