Reunión internacional en la capital de Somalia por primera vez en casi 30 años
La capital de Somalia acogió este sábado con grandes medidas de seguridad una reunión de ministros de Relaciones Exteriores de países del este de África sobre el proceso de paz en la región, la primera de este tipo en más de dos décadas.
Con motivo de la reunión de la Autoridad Intergubernamental sobre el Desarrollo de África Oriental (Igad por sus siglas en Inglés), Mogadiscio, objetivo recurrente de los ataques de los islamistas shebab, está bajo grandes medidas de seguridad.
La reunión, que duró algunas horas, se celebró en un hotel cercano al palacio gubernamental.
Aunque Mogadiscio ha recibido la visita de importantes líderes internacionales, como la del secretario general de la ONU Ban Ki-moon en octubre, esta fue la primera reunión internacional de este nivel en más de dos décadas.
El presidente somalí, Hasan Sheij Mohamud, pidió a los habitantes de Mogadiscio que cooperen y que "sean pacientes frente a la presión de la presencia de fuerzas de seguridad en las calles".
Al iniciarse la reunión, el presidente somalí dijo que se trataba de "un momento histórico", posible gracias a que el ejército somalí y la Amisom (Fuerza de la Unión Africana en Somalia) "han conseguido expulsar a los shebab de varias regiones" del país.
Según el presidente, se trata de la primera reunión de este tipo en 28 años. En ella participaron entre otros los ministros de Exteriores de Yibuti, Kenia y Etiopía.
Estos tres países participan en la Amisom, que lucha contra los islamistas shebab junto al débil ejército somalí.
Al término de la reunión , el ministro etíope de Exteriores, Tedros Adhanom, que presidió los debates, enumeró sus principales conclusiones: los ministros "alentaron" a Somalia a "unificar sus fuerzas armadas", "condenó los ataques de los shebab" y "llamó a la Amisom a extender sus operaciones militares" contra los islamistas.
La conferencia se celebra poco después del nombramiento de un nuevo primer ministro, Omar Abdirashid Ali Sharmarke, que sustituye a Abdiweli Sheij Ahmed, destituido por el parlamento.
Desde la caída del régimen autoritario del presidente Siad Barre en 1991, Somalia no ha tenido un gobierno central efectivo y estable.
Desde entonces el país vive en un estado permanente de guerra civil, en la que se enfrentan milicias, grupos criminales e islamistas como los shebab.