Protestas se multiplican en Perú y le preocupan a Humala
El intento de campesinos de ocupar un aeropuerto al sur del Perú, saldado con dos muertos ayer, se sumó a una serie de protestas en el país que llevaron al próximo presidente, Ollanta Humala, a pedirle al actual mandatario Alan García que no le deje un campo minado.
Los dos muertos de este conflicto se suman a otras tres personas -entre ellas un niño- que murieron el martes en la central ciudad de Huancavelica en una protesta estudiantil que desbordó en disturbios y en el incendio del edificio de la Gobernación.
Los campesinos alcanzaron a tomarse ayer el aeropuerto antes de ser desalojados por la Policía Antimotines, mientras que otro grupo de manifestantes quemó pastizales en los alrededores de la terminal, que obligó a suspender las operaciones aéreas, comprobó la AFP.
El intento de toma del aeropuerto de Juliaca (sur de Lima), repelido por la Policía, forma parte de una serie de protestas -que lleva más de un mes- de campesinos que exigen que toda actividad minera y petrolera sea prohibida en el departamento de Puno.
El jueves Humala le pidió a Alan García que no le entregue un país pacificado de conflictos sociales. Esta situación se vive cuando el ex militar está a cinco semanas de convertirse en el nuevo presidente. AFP