Las cenizas del Calbuco se expanden por el Cono Sur
El volcán Calbuco, que hizo dos violentas erupciones después de más de medio siglo de inactividad, volvió a lanzar columnas de cenizas este viernes, cubriendo algunas localidades del sur de Chile y Argentina, y llegando hasta Montevideo y Buenos Aires.
Después de las dos potentes erupciones del miércoles y jueves, que levantaron una pluma de cenizas de más de 15 km, una inmensa fumarola volvió emerger desde el macizo, que permaneció dormido por 54 años.
En las localidades cercanas, las personas volvieron a salir a las calles para mirar el espectáculo que volvía a ofrecer el macizo, que según los expertos, podría volver a hacer erupción de iguales características en cualquier momento.
"Estamos aún en lo que es la crisis propiamente tal, por lo que hay una vigilancia instrumental. No es descartable un nuevo pulso (eruptivo)", dijo el director del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), Rodrigo Álvarez.
"Es muy difícil poder decir cuál va a ser el grado de explosividad de futuras erupciones, pero sí es esperada una actividad similar a lo ya ocurrido", explicó por su parte Carlos Cardona, experto de Sernageomin.
La zona afectada, ubicada en la región de Los Lagos, a unos 1.300 km al sur de Santiago, se mantenía en alerta roja, con un fuerte resguardo de las Fuerzas Armadas y con las clases en colegios suspendidas.
Por la tarde, las autoridades decretaron una "evacuación preventiva de los sectores de Chamiza, Lago Chapo y Correntoso", sumando unas 2.000 personas a las más de 4.000 desplazadas anteriormente desde una zona de exclusión de 20 km alrededor del cráter.
La evacuación se ordenó ante el riesgo de crecida de ríos por el derretimiento de nieve alrededor del macizo.
"Hay lahares (aluviones) que están bajando por la parte posterior y eso involucraría un crecimiento importante de los caudales de los ríos", dijo Luis Lira, comisario de policía de Puerto Montt, a la televisión Nacional de Chile.
Ensenada, un pueblo sumergido
La pequeña localidad de Ensenada, a unos 10 km de distancia del macizo, fue evacuada por completo. El pueblo de unos 1.500 habitantes quedó semiabandonado, con unos pocos policías y algunos pobladores que volvieron a recoger enseres al lugar, una hermosa localidad que vive del turismo.
El gris de las cenizas volcánicas cubría los techos de las casas y algunos tejados, los más ligeros, cedieron ante el peso del material volcánico sobre ellos. En el camino de acceso a la localidad no se podía avanzar, incluso en vehículos con tracción, debido al espesor de las cenizas acumuladas, que en algunos lugares llegaban hasta el metro de altura.
La nube de cenizas se había dispersado hacia el este, cubriendo localidades argentinas en la región patagónica de Neuquén y llegando incluso hasta la capital, Buenos Aires, donde se habían cancelado algunos vuelos desde y hacia Estados Unidos y Europa.
Las partículas cubren "toda la zona central de país, esto incluye Buenos Aires, La Pampa, Mendoza, San Luis, sur de Córdoba y de Santa Fe", aunque permanecen a gran altura, según un parte del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) argentino.
Las cenizas llegarían también hasta Uruguay, donde se descartó sin embargo cerrar el espacio aéreo y no se prevén afectaciones a la población.
En Santiago, el aeropuerto operaba con "normalidad", según confirmó una fuente de comunicaciones de la terminal aérea.
Proceso eruptivo puede durar semanas
El Calbuco, de 2.003 metros de altura ubicado en la sureña región de Los Lagos, en Chile, entró inesperadamente en erupción la tarde del miércoles para acrecentar su actividad con la expulsión de cenizas la madrugada del jueves, lo que se prolongó por algunas horas.
Luego de permanecer en calma durante la noche, el tercer volcán más peligroso en Chile retomó una moderada actividad que podría intensificarse en el transcurso del día.
"Estamos con (emanación) de cenizas, es una situación menor. Pero no es descartable que durante el día, en las próximas horas podamos tener un nuevo pulso (eruptivo)", dijo Rodrigo Álvarez, director del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin).
"Estamos todavía en la etapa de lo que es una crisis propiamente tal (...) lo que puedo dar certezas es que el proceso no va a terminar ahora. Este es un proceso que es complejo y que puede durar semanas", apuntó Álvarez.
Tras la erupción del Calbuco, los expertos han identificado la formación de al menos seis cráteres, una señal de la fuerza del fenómeno que también se ha manifestado con una columna de material piroclástico de hasta 17 kilómetros de altitud. (I)