Un perro fue asesinado por policías de Reino Unido luego de que los agentes abrieran fuego contra el animal porque, según ellos, representaba un peligro por los fuertes ladridos y la actitud.

Los agentes llegaron hasta Cameron Road, Derby, en donde se reportó una queja por un ruido extraño que provenía de una de las casas del vecindario.

Cuando llegaron al lugar, los agentes no pudieron pasar porque el perro bloqueó su camino y empezó a ladrar de forma descontrolada, lo que impedía que los policías pudieran hacer la inspección de las inmediaciones en relación a la denuncia que recibieron.

Ante la situación, los agentes dispararon contra el perro que murió en el lugar y así pudieron entrar a la casa que merecía la inspección. Según medios internacionales, en el lugar se encontró a una persona herida y mutilada que recibió la atención de los agentes y fue llevado hasta un hospital en donde se recupera de forma favorable.