Una denuncia de la policía de Colombia sobre el uso de adolescentes pintados de verde y equipados con explosivos por la guerrilla  Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) conmocionó al país, que padece un sangriento conflicto armado desde hace medio siglo, pero que no tenía referencias sobre esta práctica.

Un video difundido esta semana por la policía colombiana puso en evidencia la cruda realidad, que confirma las denuncias hechas desde hace mucho tiempo sobre el reclutamiento de menores por los grupos armados ilegales.

Imágenes, tomadas en el departamento  de Santander, muestran a una adolescente, de 14 años, herida en una pierna, con el cuerpo medio desnudo  pintado de verde, que  la obligan a detonar, en forma suicida, explosivos contra una patrulla, una técnica utilizada por las FARC.

En el lugar, también fue encontrado el cuerpo destrozado de otro adolescente, también pintado de verde, luego de que según la policía hubiera activado un artefacto explosivo contra una patrulla que pasaba por el lugar, en un atentado que causó la muerte a siete policías, explicó el coronel Eliécer Camacho, jefe de la policía de Santander.
Se estima que el número de niños en las filas de grupos armados podría llegar a 10.000, según un informe de Naciones Unidas.