Persistentes violaciones de DD.HH. en minas de México
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) recordó este viernes que en México "se han documentado conductas tolerantes y omisas de servidores públicos" para hacer cumplir la ley en materia de seguridad e higiene en las minas, donde al menos diez personas han muerto esta semana en dos accidentes distintos.
"Las autoridades responsables de verificar la salubridad y seguridad en estos centros de trabajo deben cumplir su función en estricto apego a derecho y velando por la seguridad e integridad de quienes laboran en esos lugares", señaló la CNDH en un comunicado.
El pasado 3 de mayo una fuerte explosión causada por acumulación de metano en una pequeña mina de carbón o "pocito" de Sabinas, en el estado de Coahuila, dejó hasta el momento siete muertos, siete mineros atrapados y uno más, de 15 años, herido de gravedad.
Ayer otro suceso ocurrido en una mina de ópalo en el occidental estado de Jalisco dejó a tres personas muertas, aunque las víctimas eran ajenas a la explotación que habían ingresado a ella sin permiso, según la Secretaría de Economía.
Respecto al primer accidente la CNDH, un organismo público descentralizado con funciones de oficina del Defensor del Pueblo en México, explica hoy que desde el 3 de mayo ha pedido "medidas cautelares" para "garantizar la vida, integridad, y en su caso, el rescate de los cuerpos de los trabajadores de la mina".
La solicitud está dirigida a las secretarías (ministerios) del Trabajo, encargado de salvaguardar la seguridad de los trabajadores, y a la de Economía, que otorga las concesiones para explotar la zona.
Fuentes de la CNDH dijeron que el organismo quiere que "se haga lo posible por rescatar con vida" a las personas que siguen atrapadas, aunque las esperanzas de lograrlo se desvanecen cada hora que pasa.
En estos momentos personal de la CNDH se encuentra en la boca de la mina "para indagar lo sucedido y las posibles violaciones a los derechos humanos" que haya sucedido.
A futuro, la oficina del ombudsman mexicano, Raúl Plascencia, señaló que los mineros deben contar con "equipo de protección adecuado para el desempeño de su labor como guantes, cascos, linternas y otros aditamentos que eviten accidentes o daños".
"Se debe tener suficiente equipo de iluminación, limpieza y señalización, así como extintores, extractores de humo y otros instrumentos necesarios para el óptimo funcionamiento de estos sitios", agregó la CNDH.
También solicitó a las compañías que consideren "el uso de metanómetros, instrumentos indispensables" en los pozos de carbón para medir las concentraciones de ese gas y alertar a tiempo de posibles situaciones de riesgo.
La organización civil Familia Pasta de Conchos, constituida tras la peor tragedia minera ocurrida en México en 2006, en la que perecieron 65 trabajadores, recordó que en las inspecciones realizadas por las autoridades de 2008 a 2010, de veintiún empresas examinadas, sólo dos los tenían.
La CNDH consideró "fundamental" la coordinación de las secretarías del Trabajo y de Economía para hacer frente a los abusos y "la vigilancia del acatamiento de las normas de seguridad en todas las minas del país" para impedir que se repitan estos accidentes.