Los países que ejercen influencia en el conflicto armado en Siria deberían cooperar para resolver la crisis, consideró el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, este miércoles en un comunicado.

"Todos quienes tienen influencia sobre las partes en conflicto deben superar sus diferencias y trabajar juntos para poner fin al conflicto, es decir cooperar para el éxito de las negociaciones sirias en Ginebra", dijo Guterres en el marco de los seis años de resistencia y guerra en Siria, que ha dejado a su paso tristeza, devastación, muerte, crisis social, existencial, material, política y ambiental.

A su vez, el funcionario instó a los trabajadores humanitarios a "sacar el mayor provecho posible" al cese del fuego acordado en Astaná el 30 de diciembre para acceder a zonas donde la población necesita ayuda.

Por su parte, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, condenó el doble atentado suicida que se registró este miércoles en la zona de Al Rabua, en el noroeste de Damasco y cobró la vida de al menos 35 personas y 45 heridos.

"Staffan de Mistura condena los ataques que coincidieron con el sexto aniversario del inicio del conflicto en Siria y que segaron la vida a inocentes ", precisó.

Los atentados se produjeron durante la tercera ronda de negociaciones sobre la resolución para la paz en Siria que concluyó este miércoles en Kazajistán.
Mistura aseveró que los ataques iban dirigidos contra el proceso de paz en Siria y agregó que "después del último encuentro en Astaná, no se puede permitir que el proceso de paz sea frustrado".

Siria se desangra en un conflicto armado, que ha cobrado la vida de más de 300 mil personas, de acuerdo con cifras de la ONU. También ha dejado más de 4.5 millones de desplazados externos, miles de ellos hoy protagonistas y víctimas del rechazo en Europa. (I)