El FMI ofrece ayuda financiera a Ucrania
ONU desconoce anexión de Crimea a Rusia
Con el apoyo de un centenar de países, la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) aprobó la resolución que rechaza el referéndum de adhesión de Crimea a Rusia, e insta a Moscú y a Kiev a encontrar una solución pacífica a través de un diálogo “directo”. Ecuador, junto a Brasil, Argentina y Uruguay, estuvo entre los 58 países que se abstuvieron.
La resolución, no vinculante y en la que no se nombra a Rusia, llama a la comunidad internacional a no reconocer una modificación de las fronteras ucranianas y a encontrar una resolución diplomática. Según el texto, no debe reconocerse el resultado del referéndum en el que los habitantes de la península ucraniana de Crimea votaron a favor de integrarse en la República Rusa. La postura de Rusia fue apoyada por Bolivia, Venezuela, Corea del Norte, Nicaragua y Zimbabwe, entre otros.
Rusia considera que el organismo trata de desvirtuar la esencia de los procesos en este país.
“Fuimos testigos de la más grave violación del derecho internacional”, afirmó durante la sesión el ministro de Exteriores del gobierno interino de Ucrania, Andrei Deschitsa. “Esta agresión fue preparada y planificada, aunque no existía el menor motivo”, agregó el ministro, que aseguró que su país buscó un acercamiento a Rusia.
Sin embargo, el embajador ruso ante la ONU, Vitali Churkin, se remitió al referéndum de Crimea. “Una impresionante mayoría votó a favor de la adhesión a Rusia. No podíamos menospreciar la voluntad del pueblo”, explicó.
También el viceministro de Exteriores de Rusia, Guennadi Gatílov, aseguró que el proyecto de resolución sobre Ucrania contra Rusia en la ONU es un intento para tratar de desvirtuar la esencia de los procesos en este país.
Por su parte la representante de Estados Unidos ante la ONU, Samantha Power, denunció que Rusia ha actuado desde su posición de fuerza.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) llegó a un principio de acuerdo con las autoridades de Ucrania para facilitarles un crédito de entre 14.000 y 18.000 millones de dólares. Por su parte, el gobierno de Kiev se ha hecho eco de las exigencias del FMI y presentó un presupuesto marcado por unos duros recortes y la subida de los precios del gas y la electricidad.