Organizaciones de derechos humanos en Estados Unidos alertaron de la incertidumbre y los riesgos que implica el plan anunciado por el gobierno del presidente Donald Trump de devolver a México los inmigrantes que entran irregularmente, mientras se resuelven sus procedimientos migratorios.

La directora de Protección para Refugiados de la ONG Human Rights First, Eleanor Acer, aseguró que uno de los aspectos que más complicaciones afrontará la medida será la representación legal de quienes sean devueltos a México durante los procesos de los casos migratorios.

“Creemos que es ciertamente imposible que el proceso se desarrolle de forma acorde a la ley estadounidense”, comentó Acer.

Según datos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de EE.UU., 7.000 migrantes aguardan al otro lado de la frontera, principalmente en Tijuana y Mexicali, para presentar su solicitud de asilo. (I)