Ocho personas murieron ayer y 63 resultaron heridas en una explosión, provocada por un escape de gas, registrada en un edificio de 10 pisos en el centro de la ciudad de Rosario, a unos 300 kilómetros al noroeste de Buenos Aires, informaron fuentes oficiales.

La fiscal de instrucción de turno de Rosario, Gabriela Argüelles, confirmó la cifra de fallecidos, que podría aumentar ya que  hay personas desaparecidas que estarían atrapadas entre los escombros.

El ministro de Salud de la provincia de Santa Fe, Miguel Ángel Cappiello, explicó que los heridos fueron trasladados a cuatro hospitales de Rosario con fracturas múltiples, politraumatismos y contusiones.

Los equipos de rescate trabajan en la búsqueda de posibles nuevas víctimas entre los escombros del bloque de viviendas donde se produjo la fuerte detonación, que afectó a otros edificios de la zona y pudo escucharse en más de cuarenta manzanas a la redonda.

El contrafrente del edificio se derrumbó y desde la calle se podía ver el interior de los departamentos y los balcones destrozados.

En declaraciones a los medios, la alcaldesa de Rosario, Mónica Fein, confirmó que la causa de la explosión, que ocurrió alrededor de las 09:40 hora argentina (12:40 GMT), fue “una fuga impresionante” de gas, aunque, matizó, “será la Justicia la que  deberá determinar los motivos de la explosión”. (EFE/AFP)