Obama no veraneará este año en la isla de Marthas Vineyard
Desde que llegó a la Casa Blanca en 2009, Obama ha elegido para pasar las vacaciones de agosto junto con su esposa, Michelle, y sus dos hijas, Malia y Sasha, la isla de Marthas Vineyard, un lujoso enclave del estado de Massachusetts que se encuentra entre los lugares preferidos de la elite progresista del país.
"Ellos no vienen este año", explicó al diario el sargento Thomas Medeiros, de la policía estatal, quien agregó que la noticia le llegó desde el Servicio Secreto, el cuerpo encargado de velar por la seguridad del presidente.
Mientras, la directora ejecutiva de la Cámara de Comercio de Marthas Vineyard, Nancy Gardella, contó a The Boston Globe que la Casa Blanca había reservado alojamiento en la isla para agosto, pero en mayo canceló esos planes.
Durante los últimos tres veranos los Obama se alojaron en una finca frente al mar en Chilmark que fue vendida en noviembre por 21,9 millones de dólares, según el diario.
En 2011 los republicanos criticaron a Obama por irse de vacaciones a este lugar en un momento de preocupación en el país por la situación económica y tras la crisis de la deuda con la rebaja de la calificación por parte de Standard & Poors.
El presidente pasó nueve días allí el pasado año, pero tuvo que adelantar su regreso a Washington ante la llegada del huracán "Irene" a la costa este del país.
Obama está descansando junto a su familia desde el sábado pasado en la residencia presidencial de Camp David (Maryland) y regresará a Washington el martes por la noche para cumplir con algunos compromisos públicos.
El miércoles el presidente participará en la Casa Blanca en las celebraciones del 4 de julio, día de la independencia de EE.UU., y el jueves iniciará una gira en autobús por los estados de Ohio y Pensilvania, claves para obtener la victoria en las elecciones del 6 de noviembre.