Los aviones de la coalición internacional contra el grupo Estado Islámico (EI) bombardearon el bastión yihadista de Raqa este sábado, mientras continúa la incertidumbre sobre la suerte de la rehén estadounidense supuestamente muerta en un bombardeo de la coalición en el norte de Siria.

Aunque el EI anunció el viernes la muerte por fuego amigo de la trabajadora humanitaria Kayla Jean Mueller, de 26 años, Washington aún no ha confirmado la información porque dice carecer de pruebas, al tiempo que Jordania ha expresado su escepticismo al respecto.

"Estamos muy preocupados por estas informaciones", declaró la portavoz del Consejo estadounidense de seguridad nacional (NSC). Añadió, sin embargo, que no disponía "por el momento de indicios tangibles" sobre la muerte de la rehén.

Según el EI, que se ha apoderado de amplias zonas de territorio en Siria e Irak, "la aviación de la coalición bombardeó una posición fuera de la ciudad de Raqa durante la oración del viernes", matando a una "rehén estadounidense (Mueller)" en un ataque de las fuerzas jordanas.

Los yihadistas no divulgaron fotos del cuerpo de la rehén, y publicaron únicamente imágenes de inmuebles destruidos. Una leyenda precisaba que se trataba de los escombros en los que la norteamericana murió.

El ministro jordano de Exteriores Nasser Judeh expresó sus dudas sobre las afirmaciones del EI, y calificó de "viejo ardid de los terroristas" las informaciones sobre cautivos muertos en bombardeos.

"Somos muy escépticos, indicó a la AFP el portavoz del Gobierno jordano. "No es lógico. ¿Cómo pueden identificar un avión desde tan lejos? ¿Qué hacía la estadounidense en un arsenal? Todo esto es parte de su propaganda criminal".

El ejército se limitó a indicar que sus aviones habían realizado nuevas operaciones el viernes contra EI y "destruido posiciones (...) de esta organización terrorista".

Los padres de esta estadounidense de 26 años, secuestrada en la ciudad siria de Alepo en agosto de 2013, expresaron la esperanza de que su hija siga viva, y pidieron a los yihadistas que contacten con ellos como ya lo hicieran en el pasado.

En el anterior contacto, "nos dijeron que trataban a Kayla como invitada. Como tal, su seguridad y su bienestar son responsabilidad de ustedes", afirmaron.

La familia describía a la joven como "muy entregada al pueblo sirio" y afirma que ha "dedicado su carrera a ayudar a quienes lo necesitan en todo el mundo". Kayla había llegado en diciembre 2012 a la frontera sirio-turca para ayudar a los desplazados.

Según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), la coalición liderada por Estados Unidos volvió a bombardear Raqa por segundo día consecutivo el sábado, tras los ataques del viernes, que costaron la vida "al menos a 30 yihadistas, y seguramente a más".

Estas incursiones apuntaron contra "posiciones y depósitos de vehículos militares y blindados, al este y al oeste de la ciudad de Raqa", añadió esta ONG.

Amán ha multiplicado los bombardeos contra los yihadistas del EI tras la muerte de un piloto jordano, capturado a fines de diciembre por el EI tras estrellarse su F-16, y que fue quemado vivo por los yihadistas, como muestra un vídeo difundido el martes.

En Jordania, miles de personas se concentraron tras la oración semanal del viernes, para exigir que se castigue al grupo yihadista tras la muerte del piloto Maaz al Kasasbeh.

"Todos somos Maaz", "Todos somos Jordania", "Sí, al castigo, Sí a la erradicación del terrorismo", afirmaban las pancartas, entre banderas jordanas y fotos del piloto.