Nuevas protestas contra el ajuste en Argentina
Miles de argentinos volvieron a movilizarse este jueves para “decirle basta al ajuste” en la histórica Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada, en una nueva jornada de protesta contra el gobierno de Mauricio Macri convocada esta vez por las dos ramas de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA, de izquierda).
Fue una nueva manifestación masiva que sacudió al país austral con numerosos cortes de tránsito que volvieron a desatar el caos en la capital. La movilización coincidió con el fin de los paros que durante 48 horas cumplieron los docentes y médicos de la provincia de Buenos Aires, en el marco de sendos conflictos gremiales por reclamos salariales que parecen no tener solución.
La protesta de la CTA preveía originalmente un paro nacional, pero sus autoridades decidieron levantar la medida de fuerza y mantener solo la movilización después de que la mayoritaria Confederación General del Trabajo (CGT, peronista) convocara a una huelga nacional para el 6 de abril próximo, a la que adhirió. Los organizadores estimaron que se movilizaron unas 150.000 personas bajo el lema “Por el trabajo, la educación y paritarias (negociaciones colectivas de salarios) libres”.
Pablo Micheli, líder de la CTA Autónoma, dijo que “pueblo que no está en la calle no tiene destino, no tiene ninguna posibilidad de soñar, de transformar la realidad, de vivir dignamente. Trabajadores que no salen a defender su derecho a la dignidad no tenemos destino. Y hoy que hay un gobierno neoliberal es doblemente importante estar en la calle. Ojalá todos los días, hasta que se caiga este modelo económico, haya más 30 de marzo y 6 de abril. No nos van a sacar nunca de la calle”, afirmó.
Micheli dijo que “antes, ahora y después, siempre vamos a estar en la calle. Que no se preocupen en querer incitar a los trabajadores, al pueblo, a decirles que los que estamos en la calle somos enemigos de la democracia. Somos hijos de los que estuvieron en la calle” durante la dictadura.
“Eso no significa que estamos comparando a este gobierno con una dictadura. Están ahí por el voto del pueblo, la mayoría de los ricos lo votaron y algunos compañeros confundidos también, y respetamos su mandato. No tenemos ninguna intención de desestabilizar a nadie”, aseveró.
Y prosiguió: “Acusar a maestros de ser desestabilizadores y el demonio de esta educación es una vergüenza y una irresponsabilidad de este gobierno. Piensan con la cabeza neoliberal, de derecha y piensan que los trabajadores tenemos que estar arrodillados a esta política”.
Horas antes del acto, un trabajador murió en la ciudad de San Lorenzo, provincia de Santa Fe, luego de que un chofer, al parecer borracho, atropelló a un participante de una movilización que había cortado el tránsito. Micheli responsabilizó al gobierno por esa muerte. “Van generando este clima, van incitando a la violencia. Violencia es matar y los muertos siempre los ponemos los trabajadores”, dijo
Además pidió detener los despidos en el país y exigió la convocatoria a negociaciones colectivas de trabajo (“paritarias”) fijadas por ley, así como detener las importaciones. “Las Pymes están arruinadas”, sostuvo.
“Puede crecer la economía, dos puntos. Pero si no hay distribución“ el dinero “va al poder concentrado, a todos los que nos han robado toda la vida”, indicó.
“Hay que parar el ajuste para soñar tener una distribución justa de la riqueza, hay que terminar con las mezquindades, sin unidad no tenemos destino. Tenemos que juntar fuerzas. El único camino posible es el camino de la unidad. “Después del paro (del 6 de abril) más lucha hasta que cambie este modelo que nos golpea”, sostuvo.
Luego Francisco “Barba” Gutiérrez, secretario del Interior de la CGT, llamó a “luchar por un proyecto de país distinto”. No se equivoque presidente Macri, no venimos a desestabilizar, venimos a pronunciar la voz de millones de trabajadores que están reclamándole un cambio, hacia adelante, de más exclusión, de defensa de la industria, de la educación pública y no tengamos techo en las paritarias. La que desestabiliza a la democracia es esta política económica”, acotó.
Y añadió: “estas políticas están generando más recesión, aumentos indiscriminados, tarifazos, zozobras en las familias argentinas. El 6 (de abril) paro general”.
Finalmente Hugo Yasky, líder de la CTA, pidió unidad para enfrentar el programa económico oficial. “A veces preguntan si nos une el espanto (…) estoy absolutamente convencido que nos unen los mismos principios, convicciones, la misma opción”.
“Vamos a ser la unidad con aquellos que se comprometen con la clase” trabajadora, sostuvo.
Yasky, quien es maestro, dijo que “marzo fue la expresión de que el pueblo argentino está de pie, no se entrega, no agacha la cabeza y dice basta al ajuste, basta al atropello y basta de hambre”.
“Estamos viviendo una verdadera calamidad social, con 1'300.000 pobres nuevos en un año, pensemos que (puede pasar) si tenemos por delante 4 años de calamidad social. Cuando salimos a reclamar por salarios justos, trabajo y proteger a las Pymes (…) nos tildan de desestabilizadores. Le decimos al gobierno que en este país nunca un empresario poderoso perdió la vida cuando la constitución dejó de ser respetada. Nunca el hambre lo sufrieron los opulentos. Vamos a defender la democracia con la convicción que no tuvieron ellos que nunca salieron a la calle a defenderla”, enfatizó.
“Reclamar para que esto cambie es compromiso con la democracia. No hay derecho a hablar de democracia cuando se empuja al hambre a millones de niños”, sostuvo.
Y agregó: “el presidente dijo que quiere el diálogo (con los docentes en conflicto). Les decimos (…) queremos ir al diálogo para discutir el financiamiento educativo, el cumplimiento de la ley, la paritaria libre (…). Queremos diálogo, no tener que ir a agachar la cabeza”.
“Macri quiere demostrar a los empresarios que es capaz de partirle el espinazo a los docentes. No vamos a dejar solos a los docentes, ni a los estatales que el 12 (de abril) hacen su paro nacional”, indicó.
“El paro del 6 de abril es el punto máximo al rechazo a las políticas de Macri. Va a ser un plebiscito y va a ser un rechazo a la política del hambre y la opresión”, concluyó.
Antes del inicio del acto, se leyó una carta de la dirigente social del movimiento Tupac Amaru Milagro Sola, presa hace más de un año en una cárcel de la provincia de Jujuy, fronteriza con Bolivia, acusada por corrupción y considerada por el “kirchnerismo” como una “presa política”.
En su misiva, Sala dijo que los distintos funcionarios del gobierno de Mauricio Macri “fueron los cómplices de la dictadura y nos quieren hablar de democracia. Dicen que los queremos echar, pero con millones de votos en las elecciones. Nos difaman con sus medios de comunicación, nos amenazan a nosotros y a nuestras familias con sus servicios de inteligencia, nos persiguen con sus jueces y fiscales. Tienen odio, resentimiento y revanchismo y nosotros amor, solidaridad y alegría. Con eso vamos a vencer, no tengan dudas”, sostuvo. (I)