La derecha argentina dio un paso atrás. Un caso de corrupción que destapó los “negocios sucios” del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, en manos del candidato presidencial opositor, Mauricio Macri, sacudió la alianza Cambiemos, que hizo un culto de la palabra “transparencia”  en su campaña con vistas a las elecciones del 25 de octubre.

El periodista deportivo Fernando Niembro, uno de los rostros más reconocidos de la señal Fox Sports, renunció a su candidatura como primer candidato a diputado nacional por Cambiemos en la estratégica provincia de  Buenos Aires, donde vota el 37% del padrón nacional. ¿La causa? En los últimos tres años recibió del gobierno porteño más de 21 millones de pesos (unos $ 2 millones) por servicios contratados a su empresa La Usina Producciones -que no tenía empleados ni página web- sin licitación o compulsa de precios.

La sospecha es que Niembro recibió el dinero del Municipio a cambio de promocionar en sus programas de radio y TV los actos de gobierno de la alcaldía e impulsar el frente derechista de frente a los comicios. En su defensa el periodista dijo que vendió su parte en la empresa al lanzar su postulación, pero lo hizo a un precio irrisorio: 20.000 pesos, o $ 2.000, para una compañía que facturó $ 2’000.000 en tres años.

Lo curioso es que vendió su parte a Alina Mesa, hija de su socio Alberto Meza, quien mientras hacía negocios millonarios con la ciudad figuraba en la lista de candidatos a diputados del PRO en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 9 de agosto.

La renuncia de Niembro a su candidatura representa un duro golpe para el frente liderado por Macri, conformado por el partido Propuesta Republicana (PRO), por la centenaria Unión Cívica  Radical (UCR) y la Coalición Cívica de la diputada Elisa Carrió, la dirigente que hasta hace poco tildaba de “corrupto” a su postulante presidencial. (I)