Movimiento denuncia deriva represiva en manifestaciones marroquíes
El Consejo Nacional de Apoyo al Movimiento 20 de Febrero (CNAM20F) denunció este jueves en Rabat "una deriva represiva" de las autoridades en las manifestaciones juveniles y convocó protestas nacionales el 5 de junio para condenar la violencia policial.
El coordinador del CNAM20F, Mohamed El Auni, aseguró este jueves durante una rueda de prensa celebrada en Rabat que las protestas del domingo pasado han estado caracterizadas por "el uso masivo de la violencia policial contra los manifestantes".
El CNAM20F, creado el pasado 23 de febrero por un centenar de organizaciones pro reformas en Marruecos, tiene como finalidad el apoyo al Movimiento juvenil 20 de Febrero y la movilización para sus manifestaciones, en las que se reivindica un cambio democrático profundo en el país.
El Auni añadió que la carga policial del 22 de mayo "causó decenas de heridos de diferente gravedad entre los ciudadanos y no solo afectó a los manifestantes sino también a personas que estaban por casualidad en el lugar de las protestas".
Además, el Auni agregó que "las fuerzas del orden detuvieron a varias personas durante las protestas, 27 de ellas han sido presentadas ante los tribunales en Rabat y Tánger (norte)".
"Los antidisturbios impidieron también a los fotógrafos tomar fotos de lo ocurrido y confiscaron decenas de cámaras y de teléfonos móviles para que no salgan las imágenes de la represión", recordó.
El activista marroquí explicó que "la violencia de las autoridades llegó hasta el punto de que un agente marroquí amenazó a un activista con su pistola durante esta manifestación".
Asimismo, denunció un cambio en el comportamiento del Estado hacia las protestas, que en el inicio fueron consideradas "un avance en la libertad de expresión" en Marruecos antes de comenzar a reprimirlas por la fuerza en las últimas dos semanas.
El pasado domingo, las fuerzas del orden marroquíes dispersaron con violencia protestas en varias ciudades del país de centenares de manifestantes, que respondían a una convocatoria nacional del Movimiento 20 de Febrero.
Dos días después, Amnistía Internacional (AI) denunció el uso de la violencia empleada por las fuerzas de seguridad para dispersar estas manifestaciones pacíficas, y pidió a las autoridades que se lleve a cabo una investigación "completa, independiente e imparcial" de los hechos.