Minneapolis protesta en repudio al racismo
Derek Chauvin, el exagente de Policía de Minneapolis (EE.UU.) que acabó con la vida del ciudadano afroamericano George Floyd dejándole sin respiración al inmovilizarle con la rodilla sobre el cuello, fue detenido por la denominada Agencia de Detención Criminal acusado de homicidio en tercer grado.
Con esta acusación, las autoridades consideran que, si bien no tenía intención de acabar con su vida, Chauvin habría cometido homicidio imprudente con una acción desproporcionada que provocó la muerte de Floyd el pasado 25 de mayo.
Chauvin, quien fue cesado después del incidente junto a otros tres agentes implicados en la detención de Floyd, está “bajo custodia policial.
Tenemos pruebas, tenemos el video, unas imágenes terribles, horribles, que hemos visto una y otra vez”, expresó Mike Freeman, fiscal del condado de Hennepin, Minnesota.
La ciudad de Minneapolis continúa en estado de emergencia después de varios días de protestas contra la actuación policial sobre la comunidad afroamericana.
El pasado lunes apareció en las redes sociales un video en el que se veía a Chauvin presionando con la rodilla el cuello de Floyd, esposado y desarmado. “Por favor, no puedo respirar”, decía Floyd momentos antes de perder la conciencia.
Ese video en el que se escuchan los lamentos de Floyd despertó la indignación de miles de internautas, por cuenta de las escenas de abuso policial que viven en Minneapolis y retomó el debate sobre la violencia racial en Estados Unidos, por lo cual cientos de ciudadanos salieron a protestar.
Las autoridades reforzaron la presencia policial para tratar de contener los disturbios, después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, criticase en su cuenta de Twitter la “falta total de liderazgo” en la ciudad.
Exigió al “muy débil alcalde de extrema izquierda, Jacob Frey”, que tomase medidas “para retomar el control de la ciudad”. De lo contrario, advirtió Trump, “enviaré a la Guardia Nacional para solucionarlo”.
El gobernador de Minnesota, Tim Waltz, también pidió el fin de los disturbios que desembocaron en vandalismo y saqueos, así como en el incendio de una comisaría de la ciudad.
Ante esta especie de “despertar afroamericano” y el recrudecimiento de las protestas en medio de la pandemia por la propagación del covid-19, el Departamento de Justicia estadounidense le otorgó el nivel de “máxima prioridad” a la realización de la investigación sobre el deceso de Floyd.
El expresidente Barack Obama compartió en su cuenta de Twitter un comunicado donde expresó su opinión sobre el caso de abuso policíal contra la comunidad afroamericana.
“Esto no debería ser normal en Estados Unidos en 2020. No puede normal”, lamentó Obama. (I)