El ministro de Defensa peruano, Mariano González, renunció este lunes a su cargo tras revelarse que promovió como asesora de su despacho a su novia, y se defendió asegurando que el único delito que cometió fue enamorarse.

"He tomado la decisión de poner mi cargo a disposición. No quiero ser una carga para el presidente (Pedro Pablo) Kuczynski", dijo González a la radio RPP. "No quiero exponer a la mujer que amo. Como caballero asumo la responsabilidad de mis actos. Por eso doy un paso al costado", agregó.

El domingo por la noche, el programa de TV Panorama divulgó imágenes de mediados de noviembre en las que se observa al ministro en claras demostraciones de afecto con la abogada Lissete Ortega, quien resultó ser asesora de su despacho ministerial.

Ortega entró a trabajar en el ministerio en agosto último, a los pocos días de que González asumió el cargo con el nuevo gobierno, aunque él asegura que en ese momento no tenían vínculo sentimental alguno y que entró a trabajar por sus propios méritos y credenciales académicas.

Ya dentro del ministerio, Ortega fue promovida el 18 de octubre como asesora en el viceministerio de Políticas para la Defensa y, cuatro días después, designada en el propio despacho de González, con un salario equivalente a unos 4.600 dólares mensuales. El hoy exministro asegura que el noviazgo recién se inició a mediados de noviembre, justo cuando fue filmado.

"Lo que he cometido es un hecho de amor. Mi único delito es haberme enamorado", dijo a Panorama González, quien asegura que jamás se cometieron faltas éticas o se incurrió en conflicto de intereses. Consideró que fue víctima de seguimiento para desprestigiarlo y sacarlo del cargo.

"He sido víctima de seguimiento, de reglaje por parte de una agencia de inteligencia. Para que alguien ose seguir al ministro de Defensa tiene que ser alguien especializado", comentó, tras pedir al gobierno investigar el caso.

El presidente del Consejo de Ministros, Fernando Zavala, aseguró el lunes que, junto al mandatario peruano, le pidió a González que pusiera su cargo a disposición para "evitar un mal momento a personas que no deberían haber sido expuestas en su vida privada. Aseguró que su reemplazante será designado esta semana. Descartó, además, que el propio gobierno lo haya espiado.

"No es política de este gobierno hacer ningún tipo de reglaje y seguimiento a ningún tipo de autoridad. Los servicios de inteligencia se dedican a apoyar en (las áreas de) seguridad ciudadana y seguridad general del país", comentó a la prensa. (I)