Milagro Sala denuncia persecución judicial y política en Argentina
La dirigente social de Argentina, Milagro Sala, que permanece en arresto domiciliario advirtió este viernes que "la justicia jujeña me condenará con o sin pruebas (...) Sufro una persecución de género, de raza, aunque hay quienes están peor, como la familia Maldonado, que todavía no sabe dónde está Santiago”.
Un fiscal de la provincia argentina de Jujuy (norte) peticionó la elevación a juicio oral y público de una causa en la que está procesada Sala, luego de que uno de los involucrados en un homicidio acontecido en 2007 cambiara su declaración, por lo que la dirigente de la Túpac Amaru aseveró que es una perseguida por el gobierno de Mauricio Macri.
“Estoy recontraperseguida. Tengo 26 gendarmes, 24 cámaras de seguridad y una tobillera; además tengo que salir al balcón tres veces por día”. Comparó las condiciones de su detención con Guantánamo, la cárcel de máxima seguridad que mantiene Estados Unidos en Cuba.
La diputada del Parlasur denunció que están atentando contra su vida para llevarla a la desesperación. No obstante, agregó que aunque la metan en la cárcel o sufra maltratos físicos, no le van a quitar los pensamientos y su forma de ser. “Tengo claro qué Argentina quiero para mis hijos y para mis nietos (…) A mí nadie me puede contar la pobreza, que ellos no ven”, dijo.
Sala, quien rechazó contundentemente las acusaciones de “chorra y narcotraficante”, aseveró que tuvo desagradables experiencias con los cinco allanamientos que se acometieron en su domicilio. "No encontraron nunca ni un peso ni un arma en mi casa”, enfatizó.
La reconocida activista, a quien la Cámara Federal provincial revocó la prisión domiciliaria, ya apelada por su defensa, también denunció que en la víspera Gendarmería no permitió entrar a su casa a la abuela de su hijos, de 89 años, porque no llevaba las partidas de nacimiento que demostraran el vínculo con ella. (I)