Rumores de una apertura de la frontera entre Grecia y Macedonia provocaron ayer movimientos en el campo de Idomeni y una nueva llegada de migrantes, mientras las autoridades griegas intentan evacuar a 11.600 personas bloqueadas tras el cierre de la ruta de los Balcanes.

Al final de la mañana unos 250 refugiados se dirigían de forma pacífica hacia las vías férreas, cantando, y a la espera de que llegaran otros migrantes. La policía griega, equipada con escudos, también se iba organizando.

“Sin violencia, solamente queremos pasar”, se podía leer en una pancarta. “La libertad de movimiento es un derecho para todos”, se veía en otra.

Decenas de migrantes llegaban desde los campos hasta el puesto fronterizo de Idomeni, luego de que se propagaran los rumores de apertura de la frontera, forzada por la presión de ONG y periodistas sobre las autoridades macedonias.

Algunas personas intentaban avanzar hacia los policías alineados, mientras que para evitar los enfrentamientos, otros migrantes formaban una cadena humana a algunos metros de la policía. También hay enfrentamientos entre migrantes, pues los sirios e iraquíes acusaban a los afganos de querer pasar a la fuerza. (I)