Los cuatro contendientes en las elecciones presidenciales del 1 de julio tenían previsto celebrar ayer un debate televisado que ha generado expectación y cierta polémica al coincidir en su horario de emisión con el de un partido de fútbol de la liga mexicana.

Esta es la primera ocasión en que coincidieron desde que comenzaron la campaña electoral, el pasado 30 de marzo, los cuatro candidatos: Josefina Vázquez Mota, Gabriel Quadri, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, y la primera vez en que el Instituto Federal Electoral (IFE), el árbitro de las elecciones, organice un debate.

Una encuesta de la empresa GEA-ISA publicada ayer por el diario Milenio señala que las preferencias se inclinan hacia Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), con el 47% de la intención de voto, muy por delante de la conservadora Josefina Vázquez Mota, con el 27%.

Tras ella se ubica a corta distancia el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, con el 24% de las simpatías, seguido en un discreto cuarto lugar y prácticamente con una participación testimonial sin aspiraciones por victoria Gabriel Quadri, del partido Nueva Alianza (Panal), con el 1,4%.

En la sede del debate, el World Trade Center de la capital mexicana, se repasaron en las últimas horas los detalles para la cobertura del evento, que sería  transmitido en vivo por varios canales de televisión a partir de las 20:00 hora local a la totalidad de la República mexicana.

Para el encuentro se alistaron cuatro salas de invitados con capacidad para cincuenta personas que se han puesto a disposición de cada uno de los contendientes, mientras que otra sala más acogerá a los periodistas.