Más países anuncian retiro de tropas de Afganistán
El anuncio de Barack Obama de retirar a 33.000 soldados de Afganistán antes de septiembre de 2012, y poner fin a una década de guerra contra el terrorismo, generó ayer el respaldo de las Naciones Unidas y de algunos países que también tienen soldados allá y anunciaron, a su vez, su retiro.
El plan, anunciado como el principio del fin de la guerra en Afganistán, prevé comenzar el mes próximo la retirada, para repatriar hasta finales de año a un total de 10.000 soldados, y continuar la operación con otros 23.000 antes de septiembre de 2012.
Eso dejará sobre el terreno alrededor de 68.000 militares estadounidenses, con el objetivo de completar la retirada en 2014, según un acuerdo con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
España comenzará a retirar sus tropas de Afganistán a lo largo del próximo año, de forma gradual y progresiva, anunciaron ayer fuentes del Ministerio de Defensa.
De esta manera, el Gobierno español cumplirá los plazos marcados por la OTAN en su última cumbre, celebrada en Lisboa, el pasado mes de noviembre, para la retirada de las tropas internacionales de Afganistán. La ministra española de Defensa, Carme Chacón, avanzó el miércoles que a partir de este verano comenzará la transferencia de autoridad a las fuerzas de seguridad afganas en la provincia de Herat.
Francia iniciará una retirada progresiva de sus refuerzos enviados a Afganistán, de modo proporcional y en un calendario comparable a la retirada de los refuerzos estadounidenses, anunció ayer la presidencia francesa en un comunicado.
El ministro italiano de Asuntos Exteriores, Franco Frattini, manifestó ayer el apoyo de su país a la decisión de Estados Unidos de retirar militares de Afganistán y reiteró la intención de su Gobierno de empezar a reducir su contingente en el país asiático el próximo enero.
Mientras que el primer ministro británico, David Cameron, expresó que está de acuerdo con el presidente estadounidense, Barack Obama, sobre mantener una “presión constante” contra los rebeldes afganos, pese a una reducción de las tropas, anunció ayer su oficina.
El jefe del Estado afgano, Hamid Karzai, consideró ayer una buena medida el anuncio hecho por el mandatario norteamericano del comienzo del retiro de sus tropas de Afganistán.
“Saludamos el anuncio hecho por el presidente de Estados Unidos. Consideramos que es una buena medida para ellos y para Afganistán, y la apoyamos”, agregó Karzai.
Los talibanes, por su parte, consideran que este anuncio es un acto simbólico que no será satisfactorio ni para la comunidad internacional ni para el pueblo estadounidense, cansados de la guerra, agregó un comunicado de la agrupación.
En dicho texto, los talibanes también acusan a Estados Unidos de dar falsas esperanzas sobre el fin de la guerra a su nación anunciando una victoria sin fundamento alguno.
“Las autoridades militares habrían preferido más tiempo, pero la decisión del presidente Obama de retirar 33.000 soldados enviados como refuerzo en Afganistán antes de fines de septiembre de 2012 tuvo en cuenta la situación política en Estados Unidos”, admitió el secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates.
El almirante Mike Mullen, jefe del Estado Mayor Conjunto estadounidense, afirmó, a su vez, que el plan supone más riesgo de lo que él estaba dispuesto a aceptar en un principio, pero aún así es “manejable”.
Mientras tanto, el Pentágono aseguró, a los legisladores estadounidenses que el retiro de las tropas de Afganistán anunciado por el presidente Barack Obama no implica una salida precipitada que pueda poner en riesgo los logros en seguridad alcanzados.