Más de 25 niños, de entre cinco y diecisiete años, han muerto por la represión de las fuerzas de seguridad sirias desde el inicio de la revuelta popular a mediados del pasado mes de marzo, según activistas sirios opositores.

"La lista de los mártires sirios incluye hasta este miércoles a más de 25 niños y adolescentes menores de 18 años", informó en un comunicado la Coordinadora de la Revolución Siria.

El grupo denunció que los menores fueron asesinados por "la sangrienta violencia ejercida por el régimen sirio" y que algunos de ellos fallecieron después de sufrir fuertes torturas.

La nota recoge los casos de varias de estas víctimas mortales, entre ellos el de Mahmud Al Kadre, de 12 años, que fue disparado el pasado 25 de abril en Duma, al este de Damasco, cuando iba a comprar pan.

La víctima más joven documentada es Tamam Hamzeh, de 5 años, que murió el pasado día 6 al disparar las fuerzas de seguridad contra el vehículo en el que viajaba su familia cerca de Homs, la tercer ciudad del país y escenario de violentas protestas.

Otro de los casos denunciados por la organización es el de un adolescente de 15 años, identificado como Ahmad Radwan, que recibió un tiro en el estómago y otro en el pecho al irrumpir las tropas del Ejército en la ciudad costera de Banias a principios de mayo.

En cuanto a las torturas, la Coordinadora de la Revolución Siria recoge el caso de Saleh Ahmed al Jatib, de 13 años, que murió un día después de ser detenido por las fuerzas del orden y cuyo cuerpo presentaba claros signos de tortura.

Desde el inicio de las protestas en Siria contra el presidente Bachar al Asad han muerto un millar de personas, según las organizaciones de derechos humanos, que denuncian la violenta represión del régimen contra los manifestantes.