Al menos 17 civiles y 13 soldados murieron en las últimas horas como resultado de los combates entre las fuerzas ucranianas y los rebeldes prorrusos en el este de Ucrania, informaron fuentes oficiales ucranianas. La ONU advirtió que son casi 100.000 los desplazados internos por el conflicto mientras que 130.000 ucranianos han huido a Rusia.

“Hay más de 95.473 desplazados en Ucrania, de acuerdo a la última cifra que hemos recibido y que data del pasado día 18”, sostuvo el portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Dan McNorton.

Mientras Ucrania sigue caminando sin rumbo, la tragedia aérea del pasado jueves sigue viva. Los restos del avión derribado supuestamente por un misil, con 298 personas a bordo, hace una semana continúan a la intemperie en la localidad de Torez y sin vigilancia. Australia y Holanda ofrecieron un centenar de policías para custodiar el aparato hasta que termine la investigación.

En tanto, un equipo de forenses identificó ayer en Holanda a una primera víctima del avión de Malaysia Airlines entre los restos de 227 cuerpos al país, anunció el Ministerio holandés de Justicia. “Se trata de una persona de nacionalidad holandesa”, precisó el Ministerio en un comunicado.

Los restos de la aeronave cayeron en una zona controlada por los secesionistas ucranianos prorrusos. El viernes, la Casa Blanca responsabilizó de la tragedia al Gobierno ruso, que a su vez afirma que el misil fue lanzado por el Ejército ucraniano.