Marcha pacífica contra la homofobia fue reprimida en Cuba
Ya habían caminado 400 metros, con banderas cubanas y del arco iris, cuando la Policía interrumpió la marcha.
Al grito de “sí se puede”, más de un centenar de activistas reclamaron, en La Habana, por los derechos de los homosexuales, aclarando que su pronunciamiento no tenía motivación política.
En una convocatoria inédita, vía redes sociales, los manifestantes se agruparon en el Parque Central, frente al Capitolio, y recorrieron el Paseo del Prado bajo la mirada sorprendida de los transeúntes, acostumbrados a manifestaciones oficiales.
Con consignas como “Cuba diversa”, “Lo más grande, Cuba”, los activistas LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales) mostraron su desacuerdo con la suspensión este año de la parada oficial o “Conga” contra la homofobia, que más de una década se ha realizado en la isla.
La “Conga” solía abrir la jornada contra la homofobia y la transfobia una serie de seminarios, que igual se llevan a cabo este año y que organiza el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), bajo la tutela del Ministerio de Salud.
Un fuerte dispositivo policial observó la manifestación con recelo, hasta que llegó a la intersección del Malecón, la avenida que se extiende a lo largo de la costa.
Agentes pidieron a los manifestantes que “por favor” se detuvieran y concluyeran su caminata, que no estaba autorizada. Tres manifestantes, que increparon a los agentes policiales, fueron detenidos, constató un equipo de la AFP en el lugar, según una reseña.
“No me parece justa (la interrupción de la marcha) para nada, porque no estamos haciendo nada malo”, dijo a la AFP Laydel Alfonso, de 31 años, trabajador de un restaurante privado, quien llevaba una bandera.
La nueva Constitución cubana aprobada este año condena la discriminación por cualquier motivo, incluyendo género y preferencia sexual.
Aunque quedó fuera una propuesta para definir el matrimonio, como la “unión entre dos personas”, y dejó esa precisión para el nuevo Código de Familia. (I)