Desde las diez de la mañana "tomaron" pacíficamente las calles de la capital mexicana. Encabezadas por las familias de 43 estudiantes desaparecidos, manifestaciones recorren importantes avenidas de la Ciudad de México sin que se hayan registrado incidentes durante las primeras seis horas de la llamada "Octava Jornada de Acción Global por Ayotzinapa".

Los rostros de los normalistas son de nueva cuenta estandartes al cumplirse cuatro meses de su secuestro y desaparición, perpetrada en la ciudad de Iguala, estado de Guerrero, por fuerzas mexicanas de seguridad. Nada se ha sabido de ellos y de nada han servido las promesas del gobierno, reclaman madres, padres, hermanos y esposas de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos.

"Estamos dispuestos a tomar las armas", dijo una madre visiblemente angustiada. Los familiares encabezan los contingentes que han partido desde cuatro puntos lejanos entre sí: Indios Verdes, Taxqueña, Zaragoza y Auditorio Nacional. Confluirán luego en el zócalo, plaza principal y corazón político de México.

Se espera una concentración masiva con participación de organizaciones sociales, sindicales y ciudadanía en general.

En tanto, desde la madrugada iniciaron las protestas en diversas partes del mundo, por tratarse de una acción global. En La Haya se entregó a la diplomacia mexicana un ataúd "como símbolo de que la justicia ha muerto", explicaron participantes. Con el paso de las horas se han difundido protestas de diverso tipo en Canadá, Estados Unidos, España y otros países.