El titular de la Corte Suprema de Justicia también puede entregar los atributos al futuro gobernante
Macri y Cristina se enfrentan por traspaso de poder en Argentina
A dos días del traspaso presidencial en Argentina, el anunciado cambio dio paso a los gritos. El presidente electo, Mauricio Macri, y la mandataria saliente, Cristina Fernández de Kirchner, no se pusieron de acuerdo sobre dónde se realizará la ceremonia de traspaso de los atributos presidenciales (la banda y el bastón, símbolos de poder) tras la juramentación ante la Asamblea Legislativa. Y hay cada vez más dudas de si finalmente ambos se encontrarán para este tradicional acto este jueves, 10 de diciembre.
Macri quiere que se realice después de la posesión y en la Casa Rosada, sede de gobierno, a dos kilómetros del Congreso. Pero la jefa de Estado sostiene que, según la Constitución, debe efectuarse en la misma sede legislativa.
La polémica está abierta. Su punto más candente se produjo el sábado cuando Macri pidió hablar con su predecesora. “Lo llamé. Me pasan el celu (teléfono celular) y el presidente electo comenzó con un elevado tono de voz a exigirme que debía entregarle bastón y banda presidenciales en la Casa Rosada, porque era ‘su ceremonia’, y que si no lo hacía como él decía, ¡la Corte Suprema de Justicia de la Nación! le iba a entregar los atributos, porque ya habían consultado”, contó la mandataria en su cuenta de Twitter.
Según el artículo 93 de la Constitución, el presidente debe tomar posesión de su cargo jurando ante el presidente del Senado y el Congreso reunido en Asamblea Legislativa. Macri, por lo tanto, jurará ante el actual vicepresidente, Amado Boudou. Ambos, curiosamente, están procesados por la justicia. Luego, los usos y costumbres variaron de sede para el intercambio de atributos presidenciales: a veces en el Congreso y otras en la Casa Rosada. Tanto Néstor como Cristina Kirchner recibieron el bastón y la banda presidenciales en el Congreso.
La mandataria, en su cuenta de Twitter, siguió: “debo confesar que me sorprendió la exaltada -eufemismo de gritos- verborragia del presidente electo. Cuando logré que me dejara hablar -debe parecerles raro, pero quien hablaba del otro lado del teléfono parecía otra persona totalmente distinta a la que aparece en los medios e incluso con la que he tenido algunas charlas-, a tal punto que en un momento tuve que recordarle que más allá de nuestras investiduras, él era un hombre y yo una mujer, y que no me merecía que me tratara de esa forma”.
Pero el “macrismo” está decidido a realizar la ceremonia en la casa de gobierno, un acto simbólico que no tendrá ninguna incidencia en el mando, ya que Macri ya habrá jurado entonces como jefe de Estado.
Corte Suprema
Su delfín en la ciudad de Buenos Aires, el alcalde electo Horacio Rodríguez Larreta, dijo: “el traspaso presidencial será en la Casa Rosada. Constitucionalmente, Mauricio (Macri) será presidente a partir de las 0 horas del 10. Él es quien decidirá qué se hace. Hasta las 9 de la noche decidirá Cristina. Y desde la medianoche decidirá el nuevo presidente electo”, afirmó.
Añadió: Macri “va a tomar los atributos en la Casa Rosada. Lo lógico y lo institucional es que se los diese la presidenta saliente. Ahora, si ella no quiere ir, tampoco la vamos a obligar”.
Por ello ya hablaron con la Corte Suprema de Justicia. Si Cristina Fernández de Kirhcner decide no estar en la Casa Rosada entonces sería el titular del máximo tribunal el encargado de entregarle a Macri sus preciados bastón y banda presidenciales. El “macrismo” deberá presentar un pedido formal ante la corte.
La jefa de Estado probablemente no estará en la Casa Rosada. Desde el “macrismo” aseguran que la ceremonia comenzará a las 14:00 locales (12:00 de Ecuador) y una hora después la actual mandataria tiene pasaje para un vuelo de línea a Río Gallegos, en la Patagonia argentina, para asistir a la asunción de su cuñada, Alicia Kirchner, como gobernadora de la provincia de Santa Cruz. La pelea recién empieza. (I)
Promoverá sus iniciativas
Scioli será el presidente honorario del PJ
El excandidato presidencial y saliente gobernador bonaerense, Daniel Scioli, afirmó que a partir del 10 de diciembre defenderá a casi la mitad de los argentinos que lo votaron en el balotaje electoral del 22 de noviembre.
El aspirante del Frente para la Victoria (FpV) quedó a 2,6 puntos -48,7% a 51,3%- por debajo del presidente electo, Mauricio Macri, en el escrutinio definitivo que marcó un viraje en la política argentina.
Si bien Scioli no tendrá ningún cargo público, algunos sectores lo van a promover como presidente honorario del Partido Justicialista (PJ) en la provincia de Buenos Aires, señala el diario Perfil en entrevista al político bonaerense.
En diálogo con esa publicación, Scioli aseguró: “Voy a estar ahí para defender a casi la mitad de los argentinos y para garantizarles que puedan estar cada vez mejor”, al referirse al porcentaje de votos que obtuvo.
En declaraciones anteriores Scioli dijo que desde la Fundación Desarrollo Argentino (DAR), que preside, trabajará para seguir promoviendo las iniciativas que defendió durante la campaña electoral en especial de incentivar el crecimiento de la industria nacional particularmente de la pequeña y mediana empresa, y ese mismo sector en la agricultura. (I)