Publicidad

Ecuador, 26 de Noviembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

El exfuncionario tenía ambiciones presidencialistas

Macri despide a su ministro de Finanzas

El presidente Mauricio Macri (der.) junto al exministro de Finanzas, Alfonso Prat Gay, en Buenos Aires.
El presidente Mauricio Macri (der.) junto al exministro de Finanzas, Alfonso Prat Gay, en Buenos Aires.
Foto: El Español
28 de diciembre de 2016 - 00:00 - Marcelo Izquierdo, corresponsal en Buenos Aires

El presidente argentino, Mauricio Macri, un día después de Navidad echó a su ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay. ¿El motivo? Estaba cansado del ego y las ambiciones de poder del funcionario de mayor exposición mediática del gabinete, lo que se traducía en internas políticas constantes sobre la marcha de la economía.

Y no solo eso: para evitar más disputas al interior de su gobierno decidió dividir y reinar creando un despacho de Hacienda y otro de Finanzas. Fue de hecho el primer gran cimbronazo en su gabinete de ministros.

“Hubo diferencias y Macri le pidió la renuncia”, dijo el jefe de gabinete, Marcos Peña.

Lo cierto es que Macri le ganó de mano a Prat Gay. El mandatario emuló el tango ‘Justo el 31’ de Enrique Santos Discépolo, en el que un hombre enterado de que su mujer lo abandonaría el día 1 decide adelantarse y dejarla el 31 del mes anterior.

Prat Gay solía repetir en los pasillos del Ministerio de Economía que dejaría el gobierno el 31 de marzo, que culminará la última etapa del sinceramiento fiscal, llamado blanqueo de capitales con el que el gobierno aspira a sumar unos $ 80.000 millones. Su idea era presentar el resultado de una de las jugadas más importantes de su gestión y marcharse con ambiciones presidencialistas.

Pero el jefe de Estado lo “madrugó”, un término bien argentino mencionado en el tango de Discépolo que alude a adelantarse en el tiempo para ganarle la pulseada a su rival de turno.

¿Pero quién es Prat Gay? El ahora exministro es un antiguo directivo del JP Morgan, con amplias conexiones en Estados Unidos y que suele definirse como “keynesiano”; además fue presidente del Banco Central entre 2002 y 2004, y diputado de la llamada Coalición Cívica que lidera la legisladora Elisa Carrió, integrante de la alianza derechista Cambiemos en el poder.

Prat Gay asumió como el “hombre fuerte” del gabinete económico de Macri el 10 de diciembre de 2015  con un rol bien definido: coordinar un equipo conformado mayoritariamente por empresarios y gerentes de multinacionales.

Pero desde un principio tuvo roces con varios de sus colegas, lo que causó primero una guerra interna sobre la marcha de las tasas de interés con el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, y luego en torno a la cuestión del “tarifazo”, la subida del costo de los servicios esenciales con el ministro de Energía, Juan José Aranguren.

En la Casa Rosada, sede del ejecutivo, son famosos los desplantes a varios de sus colegas cuando enviaba a un subordinado a participar de las reuniones de la “mesa chica” del gabinete económico. Para todos, Pray Gay tenía ambiciones presidenciales, lo que le hizo chocar con dureza con el jefe de gabinete, Marcos Peña, otro que apunta alto entre los funcionarios que rodean al presidente. Macri, según sus allegados, simplemente estaba cansado del ego de Prat Gay.

Pero el golpe de “knock out” vino de la mano del proyecto de ley de reforma del Impuesto a las Ganancias. Prat Gay había elaborado el plan oficial, pero el gobierno se vio obligado a negociar y consensuar con la oposición una nueva ley, lo que se tradujo en un debilitamiento de la figura del ministro de Hacienda y Finanzas. Prat Gay se había convertido en una piedra incómoda en los zapatos del presidente.

Y para cortar de cuajo una cuestión que comenzaba a írsele de las manos Macri lo echó a través de Peña. “Mauricio quiere que te vayas”, le dijo el jefe de gabinete. (I)

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

El Telégrafo

Pública FM

Social media