Por el sufrimiento durante la II Guerra Mundial
Luxemburgo pide perdón a los judíos
Luego de 70 años del fin del conflicto, Luxemburgo pidió perdón este martes a la comunidad judía por el "sufrimiento" infligido durante la Segunda Guerra Mundial y reconoció la responsabilidad de "algunos representantes" de las autoridades luxemburguesas.
"El gobierno pide perdón a la comunidad judía por el sufrimiento infligido y por las injusticias perpetradas y reconoce la responsabilidad de algunos representantes de la autoridad pública en lo inconmensurable que se perpetró", reza una declaración firmada por el primer ministro Xavier Bettel y el conjunto de sus ministros.
Los 60 diputados luxemburgueses también adoptaron el martes, por unanimidad, una resolución que reconoce "el sufrimiento infligido a la población judía, a sus miembros luxemburgueses y extranjeros, durante la ocupación nazi de Luxemburgo".
Luxemburgo estuvo ocupado por la Alemania nazi de mayo de 1940 a septiembre de 1944. La comunidad judía, compuesta en gran parte por refugiados que huyeron de Alemania antes de la guerra, sufrió en particular la ocupación.
"De los 3.000 judíos que residían en el Gran Ducado antes de la guerra, 1.200 murieron víctimas de la Shoah", dice el gobierno luxemburgués en su página web.
Según una investigación del historiador de la Universdiad de Luxemburgo, Vincent Artuso, que ha dado pie al acto de contrición del gobierno luxemburgués, "la administración luxemburguesa colaboró en la política de persecución antisemita de la administración civil alemana de tres formas".
Ayudó a "identificar a las personas consideradas pertenecientes a la raza judía, según los criterios alemanes; a su expulsión de la función pública, de profesiones liberales y de las escuelas; y al expolio de sus bienes".
En su resolución, el gobierno invita a los luxemburgueses a "aprender las lecciones de la historia y que se mantengan vigilantes ante el antisemitismo, el negacionismo y en general ante todas las discriminaciones", dos días después de que el 80% de la población rechazara en referéndum la propuesta de Xavier Bettel de conceder el voto a los residentes extranjeros en las elecciones legislativas, en un país donde el 45% de la población es extranjera.
En septiembre de 2009, e primer ministro belga de la época, Elio Di Rupo, pidió perdón por la deportación de judíos durante la Segunda Guerra Mundial, lo que originó un debate en el vecino Luxemburgo. (I)