Con el nuevo régimen laboral, jóvenes peruanos desempleados podrán acceder a un trabajo que les garantice al menos 1 año y máximo 3 de estabilidad en el sector privado, pero pierden varios beneficios como gratificaciones anuales y días de vacaciones.  

La norma aprobada por el Congreso y promulgada por el presidente Ollanta Humala está dirigida para la contratación de jóvenes entre 18 y 24 años de edad, quienes por primera vez ingresan al mercado laboral o para quienes cumplan más de 90 días desocupados.

Precisamente este sector salió la noche del lunes a la Plaza San Martín de la capital peruana, Lima, a protestar contra el nuevo régimen laboral juvenil, ya que considera que solo busca abaratar los costos para los empleadores.

“Queremos demostrar con la movilización que esta ley vulnera nuestros derechos, pedimos al gobierno que la derogue”, dijo un dirigente del Foro Juvenil de Izquierda.

En Perú hay 2,5 millones de jóvenes de 18 a 24 años, de ellos menos del 10% está empleado de manera formal, 25% es informal o cuenta con algunos beneficios y 65% está desempleado.

El nuevo texto legal contempla el pago de sueldo mínimo a $ 256 para este segmento de la población por jornadas diarias de 8 horas, afiliación al seguro social de salud e indemnización por despidos injustificados.

Lo que no incluye es el pago de compensación por tiempo de servicios ni gratificaciones anuales equivalentes a un salario adicional, seguro de vida ni bonificación por carga familiar y reduce las vacaciones de 30 a 15 días. Cabe destacar que la adaptación de la nueva norma es optativa para las empresas.

Críticos de la medida afirman que los empresarios usarán la ley para reemplazar a sus trabajadores con derechos por jóvenes, a los que despedirán cuando cumplan los 3 años fijados para permanecer en el nuevo régimen y contratarán a otros también en condiciones de precariedad.

Por su parte, el presidente Ollanta Humala afirmó que su gobierno ha hecho la ley “con la mayor voluntad, y pensando en los más pobres y vulnerables, así como en las microempresas”, para incentivarlas a contratar a jóvenes y formalizar su puesto de trabajo, publicó Telesur.

En su cuenta de Twitter el expresidente Alan García criticó la norma burlándose de la inclusión que plantea Humala en su discurso: “¡Qué tal inclusión! El gobierno ha paralizado la economía y la factura la pagan los jóvenes entre 18 y 24 años, que trabajarán sin derecho y con un menor sueldo”.