Los controles fronterizos de Dinamarca generan dudas
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, expresó ayer sus “importantes dudas” sobre la legalidad de la decisión de Dinamarca de restablecer los controles en sus fronteras con Alemania y Suecia, dentro del espacio Schengen de libre circulación.
En una misiva dirigida al primer ministro danés, Lars Loekke Rasmussen, Barroso señaló que una “primera evaluación jurídica” de la iniciativa levanta dudas importantes sobre el respeto de Dinamarca de sus obligaciones y de las disposiciones de los tratados europeos.
En particular, el presidente de la Comisión afirma que la libre circulación que rige en el espacio Schengen, que abarca 25 países, puede verse comprometida si Dinamarca instala controles fronterizos de forma permanente.
Copenhague anunció el miércoles que restablecerá los controles permanentes en sus fronteras con Alemania y Suecia para luchar contra la inmigración ilegal y el crimen organizado. La decisión fue tomada por el gobierno conservador, presionado por la extrema derecha y sin consulta previa con sus socios europeos.