Los “cambios” en las visiones de Romney
Washington.-
El casi seguro rival republicano de Barack Obama en la próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, Mitt Romney, en su afán por obtener el respaldo popular ha caído en sus propias contradicciones.
El ex gobernador y senador de Massachussets, que ahora se muestra como un conservador, que intenta establecer la igualdad entre los homosexuales y rechaza el aborto, años atrás no solo apoyó varias medidas a favor de esta práctica en su estado sino que, además, aportó ayuda económica a la organización proaborto Planned Parenthood, según revelaron medios locales.
En 1994 el ex gobernador manifestó en su campaña apoyo al aborto para ganarse un asiento en el Senado del estado, y siete años después, en su campaña para gobernador en 2002, mantenía esa postura. “Respetar y proteger plenamente el derecho de la mujer a elegir, que es un derecho muy personal, y las mujeres de nuestro estado deben hacerlo sobre la base de sus creencias, no las mías y no las del gobierno”, dijo Romney durante una convención en 2002.
Ahora Mitt Romney menciona haber cambiado de opinión y estar en contra del aborto, algo que muchos creen es parte de una inteligente estrategia política, para lograr ser nominado candidato presidencial de su partido.
Otro tema que genera críticas contra el precandidato es que posee una fortuna personal de 250 millones de dólares depositados la mayoría en fondos de inversión en las Islas Caimán, uno de los principales paraísos fiscales del Caribe, para pagar menos impuestos de lo que debería, según informó la cadena ABC.
La cantidad de dinero desviada por Romney a estas islas es entre los cinco y los 25 millones de dólares, señala el diario español.
Interrogado sobre este asunto, su equipo de campaña electoral reconoció la existencia de estos fondos de inversión en las Islas Caimán, sin especificar la cantidad de dinero que hay en ellos, aunque aseveró que Romney cumple con las leyes de liquidación de impuestos estadounidenses y no tiene deuda pendiente con el fisco.
Además, el equipo de campaña del republicano aclaró que la domiciliación de los fondos de inversión en las Islas Caimán no proporciona ventajas fiscales a los clientes estadounidenses, ya que se rigen por las mismas leyes que el resto de sus conciudadanos.
Los expertos consultados por ABC al respecto confirmaron que por los fondos de inversión en las Islas Caimán Romney paga los mismos impuestos que el resto de estadounidenses, aunque matizaron que le proporcionan otras ventajas, como intereses más bajos. Los analistas estiman que los paraísos fiscales le cuestan al fisco estadounidense unos 100.000 millones de dólares al año.