Los británicos concluyen sus operaciones de combate en Afganistán
Las fuerzas británicas y estadounidenses de la OTAN trasfirieron oficialmente este domingo el mando de la región de Helmand al ejército afgano, con lo que los británicos concluyen sus operaciones de combate en este país tras 13 años de conflicto.
La Union Jack dejó de ondear en Camp Bastion, en Helmand, al sudeste de Afganistán, una región aún sensible a la influencia talibán, mientras que los estadounidenses hicieron lo propio en el campo adyacente de Leatherneck, clave para el mando americano.
La inmensa base, construida en el desierto cercano a la provincia de Lashkar Gah, era hasta ahora la misión más importante de la OTAN en Afganistán (ISAF). En 2010-2011, el momento con mayor cantidad de tropas de la coalición en Afganistán, albergaba a 40.000 efectivos.
Varios centenares de marines americanos y británicos abandonarán pronto Helmand, en una fecha que no será revelada por motivos de seguridad.
El paso del testigo de este domingo es la última fase de una operación de evacuación que empezó en febrero, cuando empezaron a retirarse los primeros hombres y equipamiento militar.
Según el general de los Marines, Daniel D. Woo, el ejército afgano está en posición de tomar el mando. "Soy razonablemente optimista sobre el hecho de que serán autosuficientes", afirmó Woo, comandante de la región sudeste.
El general Sayes Malook, que dirige las fuerzas afganas en la región y establecerá su cuartel general en la base, explicó que el gigantesco campo se convertirá en un centro de entrenamiento militar que albergará a 1.800 soldados.
Muchas de las instalaciones de la base, que entre edificios, canalizaciones y otras infraestructuras, podrían ascender a 230 millones de dólares, se quedarán en terreno afgano.
Tras el cambio de mando de este domingo, las próximas bases que serán cedidas son las de Kandahar, Bagran, Herat y Mazar-e-Sharif.
De los 140.000 soldados que hubo en el momento más fuerte de la operación de la OTAN, hoy quedan cerca de 40.000.
La coalición seguirá retirándose progresivamente en los próximos meses y finalmente quedará una fuerza residual de 12.000 soldados, de los cuales 9.800 norteamericanos, pasada la fecha límite de la OTAN para abandonar el país, en diciembre de 2014.