Alemania y Francia preparan ultimátum para Tsipras
Los acreedores a Grecia: “O lo tomas o lo dejas”
Atenas.-
Las conversaciones para terminar con la crisis griega han entrado en la fase final, a tres días de que venza un nuevo plazo para que pague 300 millones de euros al Fondo Monetario Internacional (FMI).
Los acreedores de Grecia consideran insuficiente el último plan de reformas presentado el lunes por las autoridades griegas que necesitan con urgencia recursos para evitar la bancarrota. “Se han registrado avances, pero son realmente insuficientes”, declaró el presidente del Eurogrupo y ministro de Finanzas de Holanda, Jeroen Dijsselbloem, en una entrevista en la cadena de televisión privada holandesa RTL.
Una portavoz de la Comisión Europea aseguró ayer que era demasiado pronto para hablar de acuerdo entre Grecia y el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea, un grupo que antes se conocía como la troika.
Para evitar la crisis, en la noche del lunes la canciller alemana, Angela Merkel; el mandatario francés, François Hollande; el presidente del BCE, Mario Draghi; el titular de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker; y la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, celebraron una cumbre de emergencia en busca de una solución.
“La reunión ha servido para coordinar posturas y para poner en común una última gran oferta a Grecia, establecida estrictamente sobre las bases del programa actual”, develaron fuentes diplomáticas. Según las mismas fuentes, la propuesta será realizada en términos “Take-it-or-leave-it” (o lo tomas o lo dejas).
En declaraciones previas a la reunión, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, había acusado a los acreedores públicamente de realizar “propuestas absurdas”, de pretender “la completa destrucción de la democracia en Europa” y de querer imponer una “monstruosidad tecnocrática”.
Tras la minicumbre inesperada de los acreedores en Berlín, Atenas quiso tomar ayer el liderazgo anunciando que había entregado una copia revisada de sus propuestas. “Un plan completo” de reformas fue enviado el lunes en la noche a la UE, el BCE y el FMI, encargados de la asistencia financiera al país desde 2010, declaró Tsipras.
El gobernante, que no dio detalles sobre las 46 páginas de medidas presupuestarias y de reformas, calificó de “realistas” las propuestas para sacar al país de la crisis económica y social.
El premier enumeraba los compromisos que su gobierno está dispuesto a asumir: excedentes primarios (sin contar el servicio de la deuda) más bajos de lo previsto para 2015 y 2016 pero más altos para los años siguientes, “una gran reforma del IVA”, la reforma de la seguridad social mediante la unificación de las cajas, la supresión de las jubilaciones anticipadas, procesos de privatización y más.
A cambio, insistía en la necesidad de no desmantelar más la legislación laboral y no proceder a nuevas reducciones de las jubilaciones.
Para la Comisión Europea es una “buena señal” el intercambio de documentos de trabajo entre Bruselas y Atenas, aunque no confirmó la recepción de un plan de reformas preciso. El comisario para Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, mencionó “avances serios”, en particular, en lo que respecta a los difíciles temas del sistema de pensiones y el IVA.
Pero queda “camino por recorrer” para un acuerdo, agregó. “Todavía no hemos llegado”, dijo por su parte Annika Breidthardt, portavoz de la Comisión encargada de Asuntos Económicos.
A Grecia se le agota el tiempo para un acuerdo, ya que este viernes deberá reembolsar 300 millones de euros al FMI, el primero de los tramos de 1.600 millones que tendrá que abonar en junio a la institución.
Las autoridades confían en que sus prestamistas le den luz verde a las reformas y con ella el desbloqueo de una inyección de 7.200 millones de euros de los créditos que le otorgaron a partir de 2010.
Sin embargo, el Eurogrupo advirtió que es imposible que se produzca un desbloqueo esta semana.
Los expertos técnicos del Eurogrupo, que reúne a los ministros de Finanzas de la zona euro, harán un balance hoy durante una conferencia telefónica antes de reunirse la próxima semana. (I)
DATOS
Los acreedores reclaman reformas concretas para mejorar la competitividad de la economía griega y medidas de ahorro adicionales, a cambio de desembolsar el último tramo de ayuda de unos 7.200 millones de euros, de los 240.000 millones acordados desde 2010.
El plan de ayuda a Grecia concluirá el 30 de junio. Si no hay acuerdo para entonces, el país, al que el mercado exige tasas prohibitivas para financiarse, no recibirá asistencia financiera y puede declararse en cese de pagos.