Lo relevante es que se ha roto la barrera del miedo
OPINIÓN
Lo de Libia es bien diferente a lo que acontece en Siria. En Libia estamos ante una guerra civil y una intervención de la ONU que avaló un operativo militar. El escenario sirio es muy distinto, allí estamos ante las demandas de los ciudadanos frente a un régimen que los gobierna hace 40 años de forma dictatorial y al que ya no quieren en el poder (...)Todo pareciera indicar que la situación puede o no decantarse rápidamente como ocurrió en Túnez o Egipto, o tal vez no. Pero eso no es lo relevante. Lo realmente relevante es que la barrera del miedo se ha roto en Siria y cada vez más personas en distintas ciudades del país están dispuestas a gritar “el rey está desnudo”. Pero más importante aún es que el ciclo de dictadores vitalicios como Bachar Al Assad -desnudos o no- está llegando a su fin. Y esto no es poco, pues el mundo será un mejor lugar sin regímenes represivos como el de Assad.
No se puede equiparar Túnez con Siria en lo absoluto. Lo que hay que tener en cuenta como diferencia es la brutalidad del régimen sirio y la actitud vanidosa del presidente Bachar Al Assad cuando declaró al Wall Street Journal que “su gobierno gozaba de popularidad y llevaba una relación armónica con las bases populares”(...) Más allá de lo que hoy se ve en la revuelta siria no es exagerado llamar a la situación actual como una revolución, aunque ella se encuentre en su primera fase. La incógnita es cómo la situación continuará desarrollándose y hacia dónde derivará frente a un régimen acostumbrado al gatillo fácil y a la mentira como estrategia.
George Chaya
Catedrático, escritor y analista argentino, experto en Oriente Medio