Libia denuncia el contrabando de combustible a Europa
La fiscalía general de Libia denunció hoy la existencia de una red internacional de contrabando que transporta y vende combustible de forma ilegal en Italia, Francia, Turquía, Malta, Grecia, el Líbano y España y que le cuesta cerca de 2.000 millones de euros al año a las arcas de Trípoli.
En una rueda de prensa ofrecida en la capital, el investigador jefe de la Oficina del Fiscal General, Seddik al Saur, aseguró que su departamento coopera e intercambia información con los estados del sur de Europa para tratar de acabar con estas redes que operan en la costa norte del país, cerca de la frontera con Túnez.
"El núcleo del contrabando del combustible son las ciudades de Al Zawiya y Zawara, fronterizas con Túnez, desde donde se transporta el combustible de manera ilícita en camiones cisterna (hacia Túnez y Níger) o a través de tubos de plástico flexibles que lo llevan a barcos en el mar de camino a países del sur de Europa", denunció.
Al Zawiya y Zawara son, asimismo, el núcleo de la actividad de las mafias que comercian con los inmigrantes irregulares, que a menudo están conectadas con aquellas que se lucran con el contrabando de gasolina.
Según estudios de grupos independientes, el contrabando total de combustible genera más de 3.000 millones de dólares al año en Libia, el doble que el de personas.
"Nuestras investigaciones revelan que existen bandas de contrabandistas que trabajan con una red internacional de manera ordenada y sistemática", explicó Al Saur, quien acusó directamente a individuos como Fahmi Salim y Salim Yarafa, que controlan el puerto de Zawara.
Según el responsable, ambos se reparten el contrabando por zonas: unos hacia el norte, con destino a Turquía, Malta, Grecia y España, y del que se tienen pruebas de que ha actuado y logrado su objetivo 24 veces el pasado año.
Y otro que lo introduce en el norte de África y en el Sahel a través de la frontera de Níger y Túnez a través de un sistema de tuberías que convergen en la localidad de Sidi Bou Said, lugar de origen de las ahora asfixiadas "primaveras árabes".
"Existe una amplia cooperación entre nuestro organismo y la parte italiana en la investigación de estos delitos, así como con la Oficina del Procurador General italiano", dijo Al Saur.
"Hemos obtenido informaciones sobre el contrabando de combustible y el dinero obtenido por este tipo de negocio, así como los nombres de quiénes están detrás de operaciones similares, incluso de las bandas pandillas que pasan de contrabando a través de la tierra y a través de automóviles privados y camiones especiales", agregó.
Además de las pérdidas millonarias para las arcas libias, el contrabando de combustible y otros derivados causa escasez e inflación en las ciudades libias, en particular en el sur, donde la casi toda la gasolina va a parar al mercado negro.
De acuerdo con Al Saur, Libia pierde más de 3.000 millones de dólares al año a causa del contrabando de combustible que subsidia el gobierno.
En octubre pasado, la periodista maltesa Daphne Caruana Galizia, que investigaba los posibles lazos de responsables de su país en el tráfico de combustible, murió en un atentado con coche bomba apenas unos días después de que la fiscalía de Catania detuviera a nueve personas por supuesta vinculación con el contrabando. (I)