Las protestas en Irán dejan mil detenidos
Al menos mil personas han sido detenidas en diferentes ciudades de Irán desde que el jueves pasado comenzaron las protestas por las políticas económicas del Gobierno. Según medios estatales, los enfrentamientos de ayer dejaron 9 muertos.
De acuerdo con el diario The Washington Post, mientras las protestas se extienden a otras ciudades los líderes en Teherán luchan por responder a la crisis interna más grave en casi una década.
Estas agitaciones son las más importantes desde el movimiento de 2009 contra la reelección del presidente ultraconservador Mahmud Ahmadineyad. Para frenarlas, las autoridades decidieron bloquear las aplicaciones Telegram e Instagram que los manifestantes usan para organizar las convocatorias.
El presidente Hasan Rouhani, por su parte, acusó a una ‘pequeña minoría’ de ‘agitadores’ de ser responsables de las agitaciones -que desde su inicio registra 21 muertes- pero aseguró que el gobierno está dispuesto a “resolver los problemas de la ciudadanía”, en particular el desempleo, que afecta al 12% de la población activa, pero esto no ha dado alivio.
La columnista de The Post, Erin Cunningham, describió: “Lo que comenzó como una frustración sobre la lenta economía de Irán se extendió para incluir un abierto desafío al liderazgo islámico de Irán”.
La frustración de los jóvenes
La columnista Cunningham detalló que muchos jóvenes iraníes se sienten frustrados por los límites a los reformadores, incluido el presidente Hassan Rouhani, para presionar por mayores libertades sociales y apertura política en un país donde los clérigos tienen todos los poderes.
Los iraníes de la clase trabajadora están descontentos por una economía estancada a pesar del levantamiento de las sanciones internacionales bajo el acuerdo nuclear con las potencias mundiales.
En este marco ayer Moussa Ghazanfarabadi, jefe de la Corte Revolucionaria de Teherán, advirtió que los arrestados podrían enfrentar casos de pena de muerte cuando vayan a juicio.
Los responsables iraníes acusan a “alborotadores” armados de infiltrarse en las manifestaciones mientras que algunos dirigentes culpan de los disturbios a “contrarrevolucionarios” instalados en el extranjero.
El general Rasul Sanairad, responsable político de los Guardianes de la Revolución, acusó en particular a los Muyahidin del Pueblo de Irán, una organización en el exilio, y a grupos monárquicos del extranjero de estar detrás de las protestas, según la agencia Tasnim.
En una repetición de la retórica de 2009, el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, ayer afirmó que las actuales protestas eran alentadas por los “enemigos” del país, Estados Unidos, sus aliados y exiliados iraníes antigubernamentales.
Irán envió efectivo, armas y combatientes para apuntalar a Siria, Líbano y Gaza, y eso también se convirtió en el foco de las protestas.
Los líderes se pronuncian
Donald Trump, presidente de Estados Unidos, aprovechó el momento para atacar nuevamente el acuerdo nuclear entre Irán y seis naciones, incluido Estados Unidos. Asimismo, pidió que deje de bloquear las redes sociales y aconsejó a sus ciudadanos instalar redes virtuales privadas o conexiones VPN.
Horas antes, el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Bahram Ghasemi, arremetió contra Trump por tratar de interferir en Irán bajo la “fachada de compasión”.
Asimismo, el vicepresidente del Yemen, Ali Mohsen al Ahmar, arremetió contra Teherán y vio el origen de las protestas antigubernamentales en las “políticas criminales” contra el pueblo, mientras que el presidente francés Emmanuel Macron le pidió al gobierno iraní “prudencia y calma”. (I)
La ONU pide respetar derechos de manifestantes
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, expresó su pesar por el número de muertos -21- en las protestas contra el gobierno en Irán, y llamó a la república islámica a respetar los derechos de los manifestantes pacíficos.
“Lamentamos la pérdida de vidas y esperamos que no haya más violencia. Esperamos que los derechos de reunión pacífica y expresión del pueblo iraní sean respetados”, dijo el portavoz de Guterres, Farhan Aziz Haq, en nombre del secretario general.
El líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, culpó el martes por la mañana a los enemigos del país por los casi seis días de disturbios mortales que han sacudido al país conservador.
Por su parte, Nikki Haley, la embajadora de EE.UU. en la ONU, instó a la comunidad a pronunciarse sobre las protestas antigubernamentales en Irán y anunció que Washington pedirá una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad sobre la situación.
“La gente de Irán está clamando por libertad”, dijo la diplomática en una conferencia de prensa. “Todas las personas que aman la libertad deben apoyar su causa”, agregó.
Haley anticipó que su país se reunirá también en la Comisión de derechos humanos de la ONU, con sede en Ginebra. (I)