Las ofensas de Trump a países generan rechazo
El presidente Donald Trump reconoció que utilizó lenguaje “duro” durante una reunión para lograr un acuerdo migratorio, pero negó el uso del término “agujeros de mierda” al referirse a El Salvador, Haití y países africanos. En tanto, las críticas llegaron desde la comunidad internacional.
“¿Por qué tenemos a toda esta gente de países (que son un) agujero de mierda viniendo aquí?”, afirmó Trump durante una reunión con legisladores en la Casa Blanca, de acuerdo con el diario The Washington Post, que cita a dos fuentes familiarizadas con el encuentro.
Esta publicación fue rechazada por la Casa Blanca, no obstante, ayer sus portavoces en Washington aclararon que solo fueron términos duros, pero no insultos.
Sin embargo, esta versión fue negada por el senador demócrata, Richard Durbin, quien participó de la reunión, y afirmó que Trump efectivamente dijo que: Estados Unidos no debería recibir migrantes de “países de mierda” y que, además, lo hizo de forma reiterada.
En noviembre, la administración de Trump rescindió la protección de deportación otorgada a casi 60.000 haitianos después del terremoto de 2010 y les dijo que regresaran a casa en julio de 2019.
Gobiernos rechazan racismo
El Gobierno haitiano condenó ayer “en términos enérgicos” las declaraciones de Trump e indicó que de ser ciertas “reflejarían una visión simplista y racista equivocada de la comunidad haitiana y su contribución a EE.UU.”.
El Gobierno de El Salvador envió una “nota de protesta” a Estados Unidos”. El canciller Hugo Martínez explicó que en el comunicado remitido ayer se destaca “el valor de los salvadoreños” y le recuerda a EE.UU. que “fueron compatriotas salvadoreños los que trabajaron en la reconstrucción del Pentágono, después de los atentados terroristas de 2001”.
Ebba Kalondo, portavoz del presidente de la Comisión de la Unión Africana (UA), que congrega a 55 Estados, Moussa Faki Mahamat, indicó que los otros gobiernos de esta región también tacharon ayer de “racistas” los comentarios de Trump.
En Ginebra, Rupert Colville, portavoz del Alto Comisionado para Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), calificó los dichos de Trump como vergonzosos, racistas y xenófobos.
La reunión sobre migración
Trump recibió el jueves en la Casa Blanca a un grupo de legisladores demócratas y republicanos para llegar a un acuerdo sobre una ley general sobre migración.
En la reunión se analizaba una solución a la situación de 680.000 jóvenes que ingresaron irregularmente al país aún siendo niños y que regularizaron su situación con la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), aprobado durante el gobierno de Barack Obama y que fue cancelado por Trump el pasado septiembre.
Para alcanzar un acuerdo que permita la renovación del DACA o una alternativa, la propuesta es que la legislación cierre la puerta a la “migración en cadena”, en la que los beneficiados incluyen a sus familiares. (I)