El estadounidense disputará las primarias junto a otros 17 republicanos
Las declaraciones de Trump son su ‘As’ para obtener la candidatura
De cara a las primarias presidenciales de 2016 en Estados Unidos, el magnate Donald Trump sigue siendo el preferido entre los 17 precandidatos republicanos pese a sus múltiples polémicas declaraciones y todo a pocos días del primer debate.
En contexto, el jueves pasado un sondeo publicado por la Universidad de Quinnipac, le da ventaja al empresario multimillonario, al igual que la cadena CNN, pero la verdadera importancia de estas encuestas es que de ellas depende el cupo que le otorgue la cadena Fox a solo 10 precandidatos republicanos para el debate del próximo 6 de agosto.
Para los conocedores del tema, el que no esté ahí se puede despedir de la campaña. Y Trump, gracias a una campaña consistente de insultos, consiguió pasar de estar completamente descartado e ignorado por el resto de candidatos a ser imprescindible en el evento.
Para el analista político mexicano Felipe González Ramírez todos estos pronunciamientos como el acusar a México de enviar “drogas y violadores”, así como su promesa de instalar vallas en la frontera le sirven para posicionarse en la memoria de la gente.
“Es una estrategia donde da declaraciones absurdas para generar críticas -para los que debaten de política- y memes -en el público joven- que le ayudan a su promoción de su imagen”. No obstante, agrega que este mecanismo no le dará resultados visualizados en votos aunque sea mediático y acota que Donald está usando todas sus armas ya que esta es una elección bipartidista donde por tradición solo clasifica un candidato por cada partido: demócrata y republicano.
El neoyorquino de 69 años personifica la imagen idealizada de los monstruos de los negocios y así lo demostró en el reality show ‘The Apprentice’ (El Aprendiz), en el que hizo a todo Estados Unidos repetir ante la televisión “¡estás despedido!”, mientras guiñaba los ojos como un vaquero. Es que sin duda su actitud lo convirtió en un personaje magistral para televisión, prueba de ello es que desde 2004 se emite ininterrumpidamente en la NBC este concurso en donde el ‘Terminator en Wall Street’ pone a los jóvenes emprendedores a mostrar sus habilidades de liderazgo emulando sus estrategias.
Es hijo de un empresario inmobiliario de Nueva York, creció con la empresa familiar en los años 60. Una década después empezó a construir la marca Trump y en los 80 ya era un ícono del ejecutivo ególatra y sin escrúpulos de las películas. Todo lo que toca lleva su nombre, según su web corporativa en Nueva York, destaca una publicación de El País.
Con cinco hijos de tres esposas, Trump es el candidato más rico que se ha presentado a la presidencia de Estados Unidos. Según el informe que se le entregó a la Comisión Electoral Federal, su fortuna está valorada en $ 10.000 millones. Entró a la lista de los multimillonarios de la Forbes en 1982. Pero se ha declarado en quiebra 4 veces; en 1991, 1992, 2004 y 2009, siempre por exceso de endeudamiento para proyectos faraónicos. Trump reconoce abiertamente que utiliza las leyes de bancarrota como una herramienta de negocios, con ellas reestructura sus deudas y sigue aumentando su fortuna.
Reacción a sus polémicas
El diario La Opinión de Los Ángeles, el periódico en español de mayor tirada de EE.UU., indicó que “Trump es el bufón oficial de esta campaña electoral”. Esto en referencia a sus comentarios sobre los mexicanos. Recordó que en 2013 ya había tuiteado con toda convicción que “el 98% de los crímenes violentos los cometen negros e hispanos”.
Mientras que el comentarista Rem Rieder exponía en USA Today el dilema de los medios con The Donald. “Trump es una mala noticia para el periodismo. No es un candidato serio, es un ladrador de carnaval. Es adicto a llamar la atención sobre sí mismo. Y sin embargo no puede ser ignorado totalmente, por muy atractiva que sea esa opción”.
En su artículo, Rieder entrevistaba a sus compañeros de redacción, que lo terminan convenciendo de que se debe cubrir al personaje, advirtiendo al lector de que él no tiene ninguna posibilidad de ganar.
Pese a las objeciones de la prensa, desde la década de 90 Trump siempre ha protagonizado escándalos por sus comentarios políticos, que han generado reacciones en la Casa Blanca, el más fuerte fue en 2011 cuando exigió la publicación del certificado de nacimiento del actual Barack Obama para demostrar que había nacido en territorio estadounidense y, por tanto, había accedido legalmente a la presidencia de Estados Unidos.
Aunque para gran parte de la población norteamericana Trump es figura nueva por su reality, para los lectores de The New York Times, no. Ellos conocen a Donald desde hace 42 años. El 16 de octubre de 1973 fue la primera vez que leyeron sobre él y no fue de la mejor forma.
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La nota firmada por el periodista Morris Kaplan lo ‘presentó en sociedad’ como ‘el mayor poseedor de tierras de la ciudad acusado de prejuicios raciales’. La nota hacía referencia a los cargos por discriminación que pesaban sobre el joven empresario (tenía 27 años) y su padre, Fred C. Trump. La denuncia se realizó en la Corte Federal de Brooklyn contra Trump Management Corporation.
Tras sus declaraciones violentas, raciales e incluso antimaternales (calificó de ‘desagradable’ a su exabogada Elizabeth Beck cuando esta pidió interrumpir una reunión para extraerse leche para su hija), la cadena Univisión, el conglomerado de medios en español más importante del país, anunció que rompía relaciones con Trump. Después NBC anunció lo mismo y no emitirá el concurso Miss USA ni Miss Universo, de su propiedad. La cadena de almacenes Macy’s decidió dejar de vender la ropa marca Trump, y, Televisa y Carlos Slim se sumaron al boicot empresarial.
El rechazo va más allá de los empresarios, ya que México y Costa Rica anunciaron que no participarán en Miss Universo. Colombia también retiró su candidatura a albergar el concurso y varios famosos rechazan públicamente sus comentarios. En Ecuador los organizadores dijeron que enviarán a la candidata.
El 8 de noviembre de 2016 se celebrarán las presidenciales en Estados Unidos. El ganador asumirá el cargo el 20 de enero de 2017 y se convertirá en el presidente 45 en la historia de esta nación. (I)