En el segundo día del alto el fuego en Siria, los principales actores del conflicto se acusaron mutuamente de haber violado la tregua. La cifra de muertos civiles por ataques terroristas y de la artillería turca, sobrepasaba ayer la veintena en zonas de las provincias de Alepo, Deir Ezzor y Hama. No obstante, en las grandes ciudades, los habitantes salieron ayer, por la mañana, para hacer sus compras aprovechando la calma excepcional que hay desde que inició la guerra en 2011.

Reportes señalaban que en el norte de Alepo, junto a la frontera con Turquía, la artillería del gobierno turco lanzó ataques contra unidades kurdas y sirias, y se apoderó del norte de la ciudad Tell Abyad.

Datos divulgados precisaron que 13 civiles murieron en esa región, según declaraciones del jefe de la misión del Kurdistán sirio en Moscú (Rusia), Rodi Osman.

El acuerdo de tregua solo incluye los combates entre los rebeldes sirios, las fuerzas del régimen, apoyadas por la aviación rusa, y la coalición de EE.UU.; excluye explícitamente a los grupos yihadistas Estado Islámico (EI) y Frente Al-Nusra, que controlan más del 50% del territorio sirio.

En Alepo, a 350 kilómetros al noreste de Damasco, fuentes policiales confirmaron la muerte de 2 personas además de 4 heridos tras ataques con morteros. También en Deir ez-Zor, a 460 kilómetros al noreste de Damasco, la capital siria, los terroristas lanzaron proyectiles de mortero contra 3 de sus barrios y mataron a 3 niños e hirieron a 12 civiles, precisaron las autoridades.

A su vez, en Salamiyeh, población cercana a Hama, capital de esa provincia, ataques con coches bomba causaron la muerte de 6 personas. También grupos del EI y Frente Al-Nusra intentaron acciones contra unidades del Ejército sirio en el área. Estas acciones fueron repelidas por las Fuerzas Armadas sirias, que liquidaron a 30 militantes yihadistas que trataron de bombardear la localidad de Tal Abyad.

Damasco también fue objeto de acciones terroristas pocas horas después de decretado el alto al fuego, la medianoche del viernes, aunque sin reportarse víctimas y sí daños materiales.

Medios informativos occidentales y la cadena catarí Al Jazeera culparon al Gobierno de Bashar al-Assad del rompimiento del cese del fuego en 15 regiones del país y se hicieron eco al respecto de declaraciones del cabecilla del grupo Fursan al-Haqq, Fares Bayush, emitidas desde la clandestinidad.

Aunque el ministro de Exteriores saudí, Adel al Yuber, denunció que la aviación rusa violó en varias poblaciones el alto el fuego, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos verificó que Rusia, aliada del presidente Bashar al-Assad, suspendió todas sus operaciones para evitar “errores” que pudieran malograr el inicio de la tregua. (I)