Rafael correa presentó la propuesta de ecuador en lyon
La puja entre ricos y pobres centra debate sobre un acuerdo climático
Unos mil alcaldes, estrellas de cine como Leonardo DiCaprio y Robert Redford y numerosas ONG acentuaban ayer la presión a favor de un acuerdo para reducir el calentamiento global durante la cumbre del clima (COP21) que se desarrolla en París, amenazada por divergencias entre países ricos y pobres.
El propio secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, instó desde Nueva York a los países industrializados, principales causantes históricos de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), a mantener sus compromisos de apoyo financiero a los países pobres, los mayormente afectados.
“Sigo pidiendo a los países desarrollados que reconozcan la responsabilidad que les corresponde”, declaró, en referencia a las discusiones sobre la creación de un fondo de $100.000 millones anuales, a partir de 2020, para ayudar a los países más afectados por la elevación de las temperaturas.
Un total de 195 países buscan desde el domingo pasado en Le Bourget (al norte de París) un acuerdo capaz de contener el aumento de las temperaturas por debajo de los 2 ºC respecto a la era preindustrial.
Los negociadores tienen hasta hoy para entregar un borrador a los ministros de Energía o Medio Ambiente, quienes a partir del lunes tomarán el testigo, con la esperanza de alcanzar durante la semana un acuerdo “histórico”.
La idea de distinguir el esfuerzo que debe hacer cada país en función de su responsabilidad y sus capacidades -la famosa “diferenciación” prevista en la convención inicial pactada en 1992- se perfila como el nudo gordiano que los diplomáticos deberán desatar en una semana.
“Tenemos que enfrentarnos a esa papa caliente, la diferenciación”, sintetizó Pa Ousmano, el negociador de Gambia. “Somos diferentes, tenemos distintas capacidades y debemos llegar a un acuerdo que refleje esas realidades”.
En este sentido, los países en desarrollo volvieron a pedir a las principales economías del mundo tanto recursos económicos como tecnologías avanzadas para enfrentarse al desafío del cambio climático.
El G77, grupo de países en vías de desarrollo, en particular los más afectados por el impacto del calentamiento del planeta, insistieron en su principal reclamación tanto para esta como para las anteriores cumbres sobre cambio climático: que los ricos asuman su responsabilidad histórica y sean los que le pongan remedio.
Correa explicó propuesta
El presidente Rafael Correa, durante su Conferencia Magistral en la École Normale Supérieure de Lyon (Francia), explicó con mayor amplitud el concepto de ‘justicia ambiental’.
Correa indicó que crecer económicamente sin límites es físicamente imposible e indeseable pues si se queman todas las reservas actuales de combustibles fósiles, el planeta pasaría el umbral de los dos grados centígrados de la temperatura global promedio, lo que a su vez desataría una catástrofe mundial ecológica.
Frente a eso esbozó dos opciones: una decisión concertada entre los habitantes de la Tierra o la reacción natural del planeta que convertirá ese ‘sueño de codicia’ en la peor pesadilla. (I)
Jóvenes proponen conciencia social
Baki: "Ecuador es un referente en el tema ambiental"
Ivonne Baki, embajadora de buena voluntad para el diálogo de culturas por la paz de la Unesco y miembro de United Nations Training, integró la comitiva que viajó a París como parte de la COP21.
La funcionaria destacó el papel de los jóvenes en la mitigación del cambio climático, por ello señaló que este grupo propone justicia y conciencia. “Ya se dañó suficiente a la Tierra y lo que los jóvenes quieren ahora es justicia. Proponen este cambio y conseguir recursos para los países en desarrollo”, dijo.
A Baki le interesó la iniciativa de Bill Gates, que unió 28 empresarios para crear un fondo con el objetivo de encontrar tecnologías que disminuyan el costo de las energías renovables. “Sí los países industrializados no se comprometen, no se llegará a nada. Es importante implementar las decisiones de los presidentes”.
Puso énfasis sobre la propuesta de Ecuador para lograr un acuerdo vinculante sobre los temas ambientales. “Ecuador es un referente en el tema ambiental, contamos con 44 áreas protegidas. El Yasuní creó una conciencia grande en el país. Hay que unirnos, reconociendo que la Amazonía es el pulmón de la humanidad”. Por ello agregó que el cambio climático no puede reducirse si no se conserva la Amazonía. “Perú, Colombia, Brasil, Ecuador unen sus esfuerzos para conseguirlo”, destacó.
La representante de Ecuador ante la Unesco dijo que el diálogo de cultura por la paz está creando un centro internacional en donde se trabajará sobre “el rol de la mujer, usando el arte”, que en su inicio iba a funcionar en Jordania, pero por los conflictos actuales podría inaugurarse en Qatar el próximo año. (I)