La Policía reprime a manifestantes que reclaman por ajustes
La Policía griega reprimió con gases lacrimógenos a manifestantes congregados ante el Parlamento de Atenas, donde se debatía ayer un nuevo plan de austeridad impuesto por la “troika” (UE, BCE y el FMI), pero hasta el cierre de esta edición se desconocían resultados.
Desde primeras hora de la tarde, miles de personas acudieron a las plazas Syntagma y la de Omonia, además de diferentes puntos de la capital hasta bloquear prácticamente todo el centro de Atenas para manifestar su desacuerdo contra el pacto entre el Gobierno y la tríada formada por el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Unión Europea.
Cerca de 25.000 personas se concentraron en el centro de Atenas, según los uniformados, que optaron por cerrar la circulación en esa zona. Sin embargo, un grupo de manifestantes ejerció presión para romper el cordón policial dispuesto en torno a la Asamblea Nacional y los gendarmes replicaron de inmediato lanzando gases lacrimógenos.
Según testigos presenciales, cuando el cantante Mikis Theodorakis trató de presionar a la Policía para que le permitiese entrar en el Parlamento y “sin que mediase provocación”, los agentes apostados en torno al hemiciclo comenzaron a lanzar gases lacrimógenos a los concentrados. “No es fácil vivir en estas condiciones, de aquí a 2020 vamos a ser los esclavos de los alemanes”, indicó Andréas Maragoudakis, ingeniero de 49 años.
Los manifestantes fueron convocados por las dos grandes centrales sindicales del país, la GSEE para el sector privado, y Adedy, del público, así como por la izquierda radical.