La Fiscalía sueca retiró 3 cargos de abuso sexual contra el periodista en agosto pasado
La policía londinense se retira de los exteriores de la embajada de Ecuador
Scotland Yard suspendió los polémicos operativos de vigilancia durante las 24 horas a Julian Assange, fundador de WikiLeaks, que permanece en la embajada de Ecuador en Londres, informó ayer la Policía Metropolitana londinense en un comunicado.
La fuerza policial británica confirmó que una presencia permanente fuera de la dependencia diplomática, donde Assange se encuentra desde junio de 2012, “ya no es proporcionada”.
Además, aclaró que los recursos policiales “son limitados”, al priorizar ahora “a muchos otros delincuentes y otras amenazas a la ciudad”.
Agentes armados de Scotland Yard estaban apostados fuera de la embajada de Ecuador, en el exclusivo barrio londinense de Knightsbridge, desde que el australiano, de 44 años, buscó allí asilo para evitar ser extraditado a Suecia tras ser investigado por supuestos delitos sexuales, que el activista rechaza categóricamente.
La Policía Metropolitana de Londres estima que la presencia de seguridad costó 12 millones de libras esterlinas ($ 18,4 millones), monto que fue financiado totalmente por el Gobierno británico en los últimos tres años.
“El Servicio de la Policía Metropolitana tiene que balancear los intereses de la justicia en este caso, con los riesgos vigentes para la seguridad de los londinenses y de todos aquellos a quienes protege, investigando crímenes y arrestando a delincuentes buscados por delitos serios, a la hora de decidir qué es una respuesta proporcionada”, destacó el comunicado del cuerpo policial.
DATOS
Julian Assange, periodista y programador australiano, es el creador y director de la red WikiLeaks, organización sin fines de lucro que hace años publica documentos de interés público, en especial sobre la política de Estados Unidos. Sus filtraciones son remitidas a los principales diarios impresos a nivel global.
El fundador de WikiLeaks se refugió en la sede diplomática ecuatoriana en junio de 2012 para evitar su extradición a Suecia, donde se lo requería para ser interrogado por presuntos delitos de índole sexual.
El 16 de agosto de 2012, el Gobierno ecuatoriano concedió el asilo político a Assange y sustentó la decisión en el derecho internacional y en el peligro que supone para la vida de Assange la extradición a Suecia o Estados Unidos o a penas de prisión excesivas.Sin embargo, aclaró que desplegará “un número de tácticas encubiertas y abiertas para arrestar” a Assange, en caso de que decida abandonar la dependencia diplomática.
El fundador de WikiLeaks buscó asilo en la embajada de Ecuador para evitar ser extraditado a Suecia, al considerar que podría ser luego trasladado a Estados Unidos, donde teme ser juzgado por revelar miles de documentos secretos del Gobierno norteamericano, de las Fuerzas Armadas estadounidenses, como también de varias multinacionales. Por esos delitos enfrentaría una cadena perpetua.
Assange obtuvo en agosto de 2012 el asilo político de parte de Ecuador bajo la Convención de Refugio de 1951.
En las últimas semanas, las autoridades de Suecia expresaron optimismo acerca de llegar a un acuerdo con el Gobierno de Ecuador, para que el australiano pueda ser interrogado en Londres por las acusaciones que penden en su contra.
En agosto pasado, la Fiscalía sueca retiró tres cargos de abuso sexual contra Assange porque prescribieron, pero añadió que él debe responder por denuncias de violación que caducarán recién en 2020.
Paralelamente el Ministerio de Relaciones de Exteriores británico convocó al embajador ecuatoriano Carlos Abad. “El jefe del Servicio diplomático, Simon McDonald, convocó hoy (12 de octubre) al embajador ecuatoriano para notificarle una vez más nuestra profunda frustración” por el encierro de Assange, afirmó la cartera de Estado en un comunicado.
“El Reino Unido ha sido absolutamente claro desde junio de 2012 en que tenemos la obligación legal de extraditar a Assange a Suecia. La obligación se mantiene hoy”, concluyó la entidad. (I)