Naciones Unidas anunció el martes que sigue de cerca la huelga de hambre de más de 1.000 palestinos en prisiones israelíes y urgió a la cautela, luego de enfrentamientos con quienes apoyan a los huelguistas en Cisjordania.

"Obviamente estamos al tanto de la situación y seguimos su desarrollo estrechamente", dijo el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric.

Los detenidos palestinos liderados por el popular dirigente Marwan Barghuti iniciaron la huelga el lunes, reivindicando mejor tratamiento médico, acceso a teléfonos y contra el confinamiento individual dentro de la prisión.

Dujarric señaló que se han producido enfrentamientos en la Cisjordania ocupada en apoyo a los presos, agregando: "hemos llamado a todas las partes a actuar con la máxima cautela".

Los presos pertenecen a todos los movimientos políticos palestinos, desde el Fatah del presidente Mahmud Abas y de su gran rival Barghuthi, hasta los partidos de izquierda, pasando por el Hamas islamista que saludó a los "valerosos prisioneros" huelguistas.

Esta huelga de hambre pretende "acabar con los abusos" de la administración penitenciaria israelí, indicó Barghuthi, en una tribuna enviada al diario estadounidense The New York Times desde su prisión de Hadarim, en el norte de Israel.

El ministro de Seguridad Pública israelí, Gilad Erdan, afirmó que las autoridades no negociarán con los huelguistas y dijo que en represalia, Barghuti ha sido puesto en confinamiento solitario luego de ser trasladado a otra prisión.

Dujarric dijo que "por una cuestión de principios, en cualquier lugar, siempre llamamos a que los prisioneros sean tratados de forma humana".

El Consejo de Seguridad de la ONU discutirá sobre el conflicto israelo-palestino en un debate abierto el jueves.  (I)