La ONU lanzó un vibrante llamado a evacuar a 500 enfermos de la región de Guta Oriental, cerca de Damasco, sitiada por las fuerzas gubernamentales desde 2013.
"Las batallas terminaron este año en Homs, Alepo, Raqa, podrían acabar en la región de Deir Ezzor, pero se desplazaron a Guta Oriental", declaró el jefe del grupo de trabajo humanitario de la ONU para Siria, Jan Egeland.

Unos 500 enfermos graves, algunos de ellos en peligro de muerte, deben ser evacuados, agregó.

"Ni uno solo ha sido evacuado en los últimos dos meses. Ni uno", se lamentó Egeland, quien precisó que en ese lapso nueve habían fallecido.

Si nos son evacuados rápidamente "muchos de ellos van a morir", insistió.

"Estamos convencidos de que podemos proceder a las evacuaciones si recibimos la luz verde del gobierno", sostuvo.

En la región de Guta Oriental viven 400.000 personas que padecen escasez de alimentos y medicamentos.

La tasa de niños menores de cinco años que sufren de grave malnutrición subió a 11,9% en noviembre contra 2,1% en enero, según cifras difundida en la víspera por la UNICEF.

Guta Oriental, última zona rebelde cerca de Damasco, es bombardeada regularmente por las fuerzas gubernamentales, a pesar de ser una de las cuatro zonas de distensión acordadas en Siria por el gobierno y la oposición en negociaciones patrocinadas por Rusia, Irán y Turquía.

El lunes, Rusia anunció a la ONU que el gobierno sirio había aceptado un alto el fuego en la región.

Desde el anuncio la situación se mantuvo calma, lo que permitió el envío de un convoy humanitario a Nachabiyé, dijo el delegado de la ONU.

Pero "dos días" de calma "no es suficiente", concluyó. (I)