La reducción progresiva de salarios fue uno de los recortes aceptados por el anterior primer ministro de Grecia, Andonis Samaras, a cambio del rescate financiero otorgado por la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Estas y otras medidas de austeridad a los servicios públicos del país (salud, educación, transporte; entre otros) dispararon los índices de desempleo que, según informaciones oficiales, se ubica por encima del 50% de la población.

Ahora Grecia está dispuesta a transitar por otro camino. El primer cambio llegará en octubre, pues el actual ministro de Trabajo, Panos Skurletis, anunció que en ese mes los sueldos aumentarán en 64 euros o $ 70.

La medida, que es parte del programa del primer ministro griego, Alexis Tsipras, es con el objetivo de recuperar progresivamente  la remuneración mínima hasta 2016. Se busca que llegue al monto calculado en 2012, es decir, 751 euros ($ 814).

En ese sentido, Skurletis explicó a la televisora privada Mega que el aumento de sueldo mínimo de octubre se ubicará en 650 euros ($ 705), respecto al salario vigente de 586 euros ($ 635), citó Telesur.

En una entrevista con la emisora de radio Vima, Skurletis aseguró que el Gobierno no dará marcha atrás “ni un milímetro” en las negociaciones con los acreedores en materia laboral.

Visita política

El portavoz del Ejecutivo griego, Gavriil Sakellarides, rechazó el pedido del FMI para aumentar los impuestos, sobre todo el del valor añadido (IVA). La tasa del IVA general es de 23%. Actualmente, el Gobierno está en una carrera contra el tiempo para lograr un acuerdo con sus acreedores antes de finales de abril para   enfrentar los vencimientos de la deuda.

Mañana deberá devolver 450 millones de euros al FMI y Atenas ha asegurado que cumplirá el pago. Grecia presentó a los acreedores una lista de reformas, que incluyen el combate a la evasión fiscal y la reforma de la administración pública con la esperanza de que estas liberen el pago de un tramo pendiente del rescate por 7.200 millones de euros.  

En este contexto, Tsipras viaja hoy a Rusia y se cree que pedirá a Vladimir Putin que levante las restricciones a la compra de sus productos agrícolas. Moscú impuso una prohibición de importar productos agrícolas de la UE, el año pasado, como represalia a las sanciones europeas contra Rusia por su apoyo a los separatistas en Ucrania.

En la visita a Moscú también podrían abordarse  asuntos de política energética y, en especial, será una muestra de que Grecia cuenta con otros aliados financieros además de la Troika europea. En el Parlamento griego, el secretario de Estado del Presupuesto, Dimitris Mardas, dijo que Alemania le debe a Grecia más de 278.000 millones de euros ($ 306.000) por concepto de reparaciones por la ocupación nazi entre 1941 y 1944. (I)