Por años, Jessica Smith quiso ocultar su pasado. Le avergonzaba reconocer que fue el rostro del famoso sol del programa infantil Teletubies. Se alejó de las pantallas para que dejaran de asociarla con el programa.

Aunque la Serie Teletubies tuvo un éxito sin precedentes, la joven que hoy tiene 28 años tuvo que pasar por todo un proceso hasta sentirse segura y contar sobre su participación. “Me escondí mucho tiempo, pero mis compañeros y amigos de la universidad me alentaron a contarlo. He ganado mucha confianza y ya puedo revelarlo: yo soy el Sol de Los Teletubbies”, explicó en el 2014 en su cuenta de Facebook.

Jessica nació en 1995, en Edenbridge, Inglaterra, y cuando tenía poco más de un año fue descubierta por los productores de la gente de la BBC. Su madre la llevó a un casting alentada por amigos y familiares, quienes quedaban prendados por la belleza de su bebé.

Así fue como la niña pasó los primeros cinco años de su vida entre el jardín de infantes y sets de grabación. Allí, las tomas de filmación no fueron un problema, desde el primer momento una cámara la filmaba mientras miraba a su papá jugar con juguetes o haciendo caras graciosas y ella se reía sin parar.

Según ella misma contó, por aparecer en el programa pagaron a sus padres 250 libras, equivalentes a USD 390, y una caja de juguetes

Cuando el contrato con la cadena televisiva terminó, en el 2002, Jess y su familia volvieron a tener una vida normal, alejada de los medios. Realmente no se supo nada de ella hasta hace apenas cuatro años cuando la joven decidió hacer pública su pasada aparición en los Teletubbies.

¿Qué fue de ella?

La curiosa figura que se reía desde el cielo es hoy una joven que estudia danza en la Universidad de Canterbury, en Nueva Zelanda. Está en pareja con su novio Ricky Latham, quien es dueño de un negocio.

Mientras se reconcilia con los medios, Jess continúa con su vida junto a su pareja y sus actividades favoritas. Pasa tiempo con sus dos perros, viaja por el mundo y asiste a todos los partidos del Liverpool, su equipo de fútbol preferido.

Lejos han quedado las actuaciones en las que, sin darse cuenta y jugando, entretenía también a niños de su edad.