Los medios de comunicación instaban a los egipcios para que acudieran a votar
La abstención gana comicios en Egipto
El Cairo.-
La baja participación en las presidenciales egipcias, más propia de la era del depuesto Hosni Mubarak, ha provocado un ataque de pánico en el Estado, consciente de que el exjefe del Ejército Abdel Fatah al-Sisi no obtendrá el mandato que deseaba.
El antiguo jefe del Ejército, que quiere demostrar que tiene un apoyo popular masivo tras destituir y encarcelar al presidente islamista Mohamed Mursi en julio de 2013, dijo que no esperaba menos de 45 millones de sufragios de los 53 millones de votantes del país árabe más poblado del mundo.
Pero la noche del martes, después de 2 días de comicios, se estimaba que la participación no superaba el 37%, lejos del 51,85% de 2012 cuando ganó Mursi, primer jefe de Estado elegido democráticamente en el país.
De esta forma el ‘Mariscal’ parece no haber superado la prueba en estos comicios. “Se está resquebrajando la imagen de Sisi que el régimen ha intentado promover. Han sobrevalorado el apoyo que tiene entre la población”, consideró Shadi Hamid, un investigador del Saban Center.
Desde el lunes, los presentadores y comentaristas de televisión se esforzaban por convencer a los egipcios de que fueran a votar, alternando súplicas y amenazas, mientras corría el rumor de que habría denuncias o multas para los abstencionistas.
Incluso el gobierno interino, liderado por Sisi desde hace 11 meses, concedió el martes un día libre a los funcionarios para que fueran a votar. Pero, insatisfecho con los resultados de participación, decidió prolongar las votaciones hasta ayer, un día más de lo previsto.